Xevi Verdaguer, experto en salud digestiva: "Es buena idea ducharse con agua caliente por la noche, porque activa el sistema inmune y hace que tu estómago esté mejor"
Muchas personas no son conscientes de la importancia que tienen nuestros hábitos al descansar para nuestra salud digestiva

Xevi Verdaguer
Madrid - Publicado el
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Dormir bien no es solo cuestión de sentirse descansado al día siguiente. El descanso nocturno está directamente relacionado con nuestra salud digestiva, con la energía diaria e incluso con el estado de ánimo. Así lo explica el experto en salud digestiva y psiconeuroinmunología Xevi Verdaguer, invitado al pódcast Tengo un Plan, donde desvela consejos prácticos para mejorar tanto el sueño como el bienestar del estómago.
"Dormir mal hace que tengas más ansiedad por comer dulce durante el día", asegura. Por eso insiste en que lo primero que hay que cuidar son los hábitos nocturnos: cenar pronto, evitar alcohol y cafeína, reducir la exposición a pantallas y, sobre todo, preparar al cuerpo para un descanso profundo.

La ducha a la noche puede ser una gran idea
"EL 50% DE LA POBLACIÓN ESPAÑOLA DUERME MAL"
Verdaguer recuerda que casi el 50% de la población española duerme mal, y que en muchos casos eso está ligado a problemas digestivos. "Si tienes falta de ácido en el estómago, es más fácil que ronques o que hagas apneas", explica. Y añade que este tipo de problemas acaban afectando al día a día: cansancio, falta de concentración o incluso sensación de tristeza.
El especialista insiste en que el objetivo es claro: "Lo normal es dormir entre 7 y 9 horas. Dormir menos de 7 o más de 10 está relacionado con peor esperanza de vida". Uno de los consejos que más sorprenden es el de la ducha nocturna: "Es buena idea ducharse con agua caliente por la noche, porque activa el sistema inmune y hace que tu estómago esté mejor", afirma.
¿Por qué? Según explica, la clave está en la regulación de la temperatura corporal. A medianoche, el cuerpo necesita enfriarse un grado y el cerebro hasta tres para activar correctamente el sistema inmune y limpiar toxinas. "Si das calor en las manos, en los pies o en los labios, el cuerpo interpreta que puede enfriarse por dentro. Esa señal es fundamental para un sueño reparador", explica Verdaguer.
Otro de los puntos clave es la luz. "Por la noche necesitamos oscuridad estricta", asegura. Si el ojo recibe luz, especialmente la azul de móviles, tablets o televisores, el cerebro interpreta que todavía es de día. Eso impide que se active el sistema inmune y retrasa el sueño profundo.
Por eso recomienda gafas que bloqueen la luz azul y, si no hay forma de evitarla, al menos dejar pantallas y luces brillantes en cuanto se ponga el sol. "Una de las cosas más importantes para dormir bien es no exponerse a la luz azul después de la puesta de sol", insiste.
el consejo para antes de dormir... de cara a tu estómago
El experto advierte que la falta de sueño continuada no solo provoca cansancio o problemas digestivos: "Si todas las noches te despiertas con la cabeza embotada o con dolor, significa que tu cerebro no ha podido limpiarse. Esto a largo plazo se asocia a neuroinflamación, párkinson o demencias".
Por eso insiste en que cada detalle cuenta: cenar dos horas antes de acostarse, evitar estimulantes, no hacer deporte de noche y favorecer la oscuridad total en la habitación. "Si no puedes, un antifaz es un gran aliado", aconseja.
Un detalle curioso que comparte Verdaguer es que los pies y las manos dicen mucho de cómo vamos a dormir. "Si llegas a la cama con los pies fríos, seguramente tengas las hormonas de estrés altas. Lo ideal es que las manos y los pies estén calientes, porque eso indica que el cuerpo ya está en modo dormir".

Tener los pies fríos puede indicar ciertas cosas
Por eso recomienda algo tan sencillo como usar calcetines o poner una manta extra en los pies. "Lo importante es que el cerebro entienda que ya puede enfriarse para repararse y regenerarse", resume.
El mensaje de Xevi Verdaguer es claro: cuidar el descanso nocturno es cuidar la salud digestiva, el sistema inmune y la energía diaria. Y no hace falta nada complicado: cenar pronto, evitar pantallas y, sobre todo, incorporar pequeños gestos como la ducha caliente antes de dormir. "Si quieres tener energía, buen ánimo y un estómago sano, el secreto empieza en cómo duermes cada noche", concluye.