El verano es una de las épocas del año en la que más tiempo pasamos fuera de casa. El buen tiempo y las vacaciones hacen que acudamos más a menudo a bares y restaurantes y dejemos un poco más de lado el cuidado de nuestra dieta. Por eso, es habitual que, con la vuelta a la rutina, intentemos retomar buenos hábitos alimenticios y, en algunos casos, queramos perder algunos kilos de más que hemos cogido durante nuestras vacaciones.

Para ello, podemos recurrir a las dietas que se conocen como depurativas, cuyo objetivo principal es combatir la retención de líquidos. Además, suelen ser dietas cortas, por lo que es más fácil cumplirlas. Un ejemplo de ellas es una dieta de siete días, con presencia de ayuno intermitente. En concreto, dos días de manera alterna comiendo tan solo unas 500 kcal y los cinco restantes entre 1.200 y 1.500.

Además, el entrenamiento es una pieza clave como complemento a cualquier dieta. Hay una serie de alimentos que son especialmente aconsejables después de una rutina deportiva, tanto para hacer más fácil y rápida nuestra recuperación, como para conseguir fortalecer más nuestros músculos.

Cinco alimentos para acelerar la recuperación tras un entrenamiento

En primer lugar, encontramos el yogur, que destaca por su aporte de proteínas y probióticos. Eso sí, no vale cualquier tipo de yogur, ya que muchos tienen un exceso de azúcar y de grasa que no nos ayudan. Lo más recomendable es optar por un yogur natural griego, que suele ser bajo en grasa. Además, es muy importante ese contenido probiótico para facilitar la digestión y, al mismo tiempo, reducir la inflamación que se pueda producir en nuestros músculos.

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Por otro lado, tenemos los huevos. De nuevo es importante el alto contenido en proteínas y, su función principal, es que nuestros tejidos se recuperen antes, fortaleciendo nuestros músculos más rápido. También hay que tener en cuenta que los huevos pueden incluirse en el desayuno, ya que son proteínas que posteriormente nos ayudarán a quemar grasa de forma efectiva.

Otro alimento son las verduras de hoja verde. Son alimentos con muchos beneficios, por lo que deben ser imprescindibles en nuestra dieta. En cuenta a su aporte tras el entrenamiento, ayuda a combatir la inflamación, derivando en menor dolor tras el ejercicio. La tarta de cerezas es otro de los ingredientes de esta lista. En general, los frutos rojos favorecen la recuperación tras una rutina de entrenamiento, pero en concreto, las cerezas ácidas tienen un aporte específico para reducir el dolor muscular. Por último, tenemos el pescado. De nuevo un producto con bastantes proteínas. En concreto, el salmón es una de las mejores opciones por su aporte de omega 3, que es antiinflamatorio y ayuda en la recuperación.