Jorge Astyaro, mentalista, sobre cómo entrar en hipnosis: "Esto lo pueden hacer en casa, siempre y cuando no estén conduciendo, porque voy a pedir que cierren los ojos"

El hipnotizador y mentalista Jorge Astyaro ha explicado en el programa ‘Fin de Semana’ de Cristina López Schlichting en qué consiste realmente la hipnosis. Lejos de ser un poder sobrenatural, Astyaro la define como "un proceso psicológico natural" y un estado de la mente que, aunque rodeado de misterio, tiene una base científica y múltiples aplicaciones, desde el espectáculo hasta la terapia. Según el experto, la hipnosis no consiste en perder el control, sino en "entregárselo a la parte más creativa de la mente".

TE PUEDE INTERESAR

Rubén Montoya, arqueólogo, señala el descubrimiento en Pompeya que desvela el mayor secreto de la ingeniería romana: "Por eso hoy podemos ver algunos edificios casi íntegros"

La hipnosis en la vida cotidiana

Astyaro asegura que en el día a día "entramos y salimos de momentos hipnóticos" con frecuencia y sin darnos cuenta. Esto ocurre al leer una novela, ver una serie o incluso al conducir, pero el ejemplo más claro es el uso del móvil: "¿El móvil no nos hace perder ese control? ¿No nos está manipulando para pensar de una manera, para comprar algo que no queremos?". Para el mentalista, las redes sociales inducen un estado de trance natural que consume nuestro tiempo y atención.

Este fenómeno se produce porque la mente se disocia, apartando temporalmente la parte racional para dejarse llevar por la imaginación. En ese estado, la mente subconsciente está más receptiva a aceptar sugestiones, siempre que no vayan en contra de los principios de la persona. Astyaro lo compara con lo que sucede al soñar: "Cuando soñamos, de alguna manera, nuestra mente racional se desconecta totalmente y nos permite vivir el sueño como si fuera real".

Cuando soñamos nuestra mente racional se desconecta y nos permite vivir el sueño como si fuera real"

Jorge Astyaro

Hipnotizador y mentalista

Del escenario a la terapia

Astyaro, que llegó a España desde México en los 2000, comenzó en el mundo de la magia y pensaba que la hipnosis era un truco. Sin embargo, tras ver un espectáculo en directo, comprendió que es un fenómeno real que requiere de la voluntad y confianza del participante. En su show, ‘Hipnonautas’, que se representa en el Teatro Maravillas de Madrid, invita al público a participar en un proceso gradual donde nadie es obligado a subir al escenario.

Durante el espectáculo, los voluntarios pueden experimentar sensaciones tan vívidas como estar en una montaña rusa, volver a la infancia o incluso hablar por teléfono con su ídolo. Astyaro recuerda el caso de una joven que quería conocer a Sebastián Yatra y, bajo hipnosis, recibió su llamada. La emoción fue tan real que, según el hipnotista, "se puso a llorar de la emoción porque Sebastián Yatra la invitaba a un concierto".

El propio Astyaro subraya la responsabilidad de los hipnotistas de espectáculo de divulgar el fenómeno de forma correcta. De hecho, ha recordado que grandes científicos y psicólogos como Freud o Charcot se inspiraron en estos espectáculos para investigar la hipnosis. Hoy, su base científica se ha demostrado con técnicas como las resonancias magnéticas, que muestran cómo cambia la actividad cerebral durante estos estados.

Se puso a llorar de la emoción porque Sebastián Yatra la invitaba a un concierto"

Jorge Astyaro

Hipnotizador y mentalista

Más allá del entretenimiento, la hipnosis tiene numerosas aplicaciones en el ámbito de la salud. El control del dolor es una de las más investigadas, y Astyaro ha trabajado con el psicólogo Isidro Pérez Hidalgo en talleres para personas con fibromialgia. También se utiliza para dejar de fumar, cambiar hábitos de alimentación, superar traumas, reducir la ansiedad o incluso en intervenciones dentales para evitar la anestesia.

La hipnosis en el cine

Su experiencia también ha llegado al cine, donde ha trabajado como asesor de hipnosis en producciones como la película ‘Abracadabra’, de Pablo Berger. En ella, impartió clases a José Mota para que su papel fuera creíble e incluso realizó una sesión real con los actores Maribel Verdú y Antonio de la Torre, que "entraron muy bien" en el estado hipnótico.