Una hostelera queda atrapada por la nieve en Aralar y cuenta cómo vive el aislamiento en 'Mediodía COPE': "Escuchas el silencio"

Una ola de frío ártico atraviesa España y ha puesto en alerta a once comunidades autónomas. Las intensas nevadas han provocado el aviso en Asturias, Cantabria, Castilla y León, Navarra, País Vasco, Aragón, Cataluña y La Rioja, mientras que otras como Baleares, Murcia o la Comunidad Valenciana lo están por tormentas, vientos y oleaje. En la Comunidad Foral de Navarra ya hay varias carreteras cortadas, incluso autovías.

Aislamiento en la sierra de Aralar

En este contexto, el Santuario de San Miguel de Aralar se ha quedado incomunicado por la nieve desde primera hora de este miércoles. Su hostelera, Mirem Zulaica, ha contado la situación en el programa ‘Mediodía COPE’ con Pilar García de la Granja, donde ha asegurado que, pese a todo, se encuentra bien. Sobre la intensidad de la nevada, ha comentado con humor que “tanto que hemos dicho, ya no nieva como antes, pues ya ha caído la primera buena”.

Zulaica ha explicado que afronta el día con buen ánimo y bien preparada. “Tenemos leña, tenemos gasoil, al calorcito del fuego se está estupendamente”, ha asegurado. Además, ha destacado la oportunidad de gozar del paisaje y la calma: “De vez en cuando sales fuera, escuchas el silencio que tenemos, porque no se oye absolutamente nada”.

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Sin prisa por el rescate

Preguntada sobre cuándo cree que podrán limpiar la carretera de acceso, Zulaica no muestra preocupación y entiende que hay otras prioridades. “Dependerá un poco de cómo siga la climatología, porque obvio, primero son las carreteras de abajo, autovías y demás”, ha señalado. Al final, estar allí es una decisión personal: “Aquí arriba estamos nosotros solos, y por decisión propia, no por obligación, pero también disfrutamos de esta soledad y esta tranquilidad”.

El temporal no solo ha traído aislamiento, sino también estampas de gran belleza. La hostelera ha relatado cómo el paisaje cambiaba por momentos: “Hace un momentito estaba precioso, porque ha salido un poquito el sol, se veía Pamplona, espectacular”. Una pequeña recompensa en medio de la primera gran nevada de la temporada.