Desde luego que no estoy en el sitio ideal para hablar de crisis, de desastre de gestión y de pandemias. Desde esta playa de Chiclana cuesta hablar del coronavirus y de la hecatombe económica. Y no te digo de quienes están al frente de este caos.

Lógicamente tengo cierta sensación de agobio, preocupación y pena. Si me apuras, sobre todo, de pena.

Lo último, un estado de alarma que no es más que un paraguas legal, lleno de eufemismos y verborrea, para que Su Persona intente gestionar con sus socios una España desvertebrada hasta el ridículo.

Y, ya de paso, para que Su Persona levite mientras sigue aplastando a la oposición.

No se ve una salida lógica ni rápida a todo esto y porque nos han tocado los peores líderes imaginables para gestionar la peor crisis desde la posguerra española. Y creo, sinceramente, que no exagero ni un pelo.

El Gobierno pide al PP que no ponga condiciones para una alarma de seis meses

La ministra de Política Territorial, CarolinaDarias, ha pedido al PP que "abandone sus condiciones" para apoyar el estado de alarma que el Gobierno quiere extender durante seis meses basándose en criterios científicos para fijar así el mismo horizonte para la pandemia que marcan otros países europeos.

"Es un plazo de máximos, pero no de mínimos", ha explicado la ministra en rueda de prensa celebrada este lunes en el Senado al término de la XXIII Conferencia de Presidentes.

Desde allí ha insistido en que la alarma se podría levantar antes, siempre y cuando se den las condiciones que permitan hacerlo por una mejoría de la situación epidemiológica.