Rocío Crusset, la hija de Carlos Herrera, sufrió este fin de semana uno de los mayores sustos de su vida. La joven tomó un vuelo de Nueva York a Los Angeles y , justo en el despegue, el aparato chocó con algo que le hizo girar bruscamente. “Por primera vez viví una experiencia muy angustiante. Iba a trabajar a Los Ángeles, y despegando, el avión chocó con algo. Se volcó y dio un giro brusco a velocidad de despegue. Lo que se te pasa en la cabeza en momentos así, es terrible. Aterrizamos de emergencia y todo terminó bien. Gracias a Dios”, explicaba la propia modelo a través de su Instagram. “Para los que preguntáis, ¡todo se quedó en un susto y ¡todo está bien! Fue muy brusco y claramente pensaba que de ahí no salíamos. Pero quedarse con el miedo dentro no sirve de nada. A vivir”, añadió

En su programa de este lunes, Carlos Herrera ha detallado algo más sobre el accidente. "Mi hija se montó en un avión en Nueva York con destino a Los Angeles y el ala choca al despegar contra no sé qué. Remonta el vuelo, ven que no pueden controlarlo y tienen que aterrizar. Mi hija pudo ver a través de la ventanilla que el ala estaba rota", ha asegurado. 

El comunicador ha reconocido que su hija ha pasado un duro trago y que, tras el incidente, decidió quedarse en Nueva York y no tomar otro avión para llegar a Los Angeles. "Yo me muero sólo por ver el ala rota", ha dicho Antonio Naranjo después de que Herrera narrara el accidente.