Kevin Kravietz es tenista profesional y puede presumir de ser campeón de un Grand Slam.

No hizo carrera en individuales y se dedicó al dobles. Un acierto, si se tiene en cuenta que se proclamó campeón de Roland Garros en 2019.

Ahora, es noticia estos días por su implicación en plena pandemia.

El alemán, de 28 años, está trabajando estos días en un supermercado de Múnich como reponedor.

Tomó esta decisión a raíz del parón del tenis por el coronavirus. A pesar, incluso, de tener más de un millón de dólares en su cuenta corriente.

Coloca la mercancía en los estantes, clasifica las cajas vacías y rocía los carritos de compras con desinfectante. Todo por un sueldo básico de 450 euros.

El número 13 del mundo en dobles quería tener un trabajo normal por un tiempo. Aprovechó las circunstancias actuales.

Se levanta a las cinco de la mañana para que los estantes del supermercado estén llenos a la hora de su apertura.

Mientras, también se mantiene activo con el tenis. Está autorizado a entrenar como profesional en una pista cubierta gracias a un permiso.

"Yo he tenido el lujo de mi vida de poder convertir mi hobby en profesión", confiesa.

Este campeón asegura que la crisis le está ayudando a tener mayor empatía con las personas.

Es la ‘Historia del día’ en‘Herrera en COPE’.