Gustavo de Arístegui, diplomático, sobre Gaza: "2,2 millones de gazatíes están hartos, enfermos y con ganas de que haya paz"
El diplomático analiza en 'Herrera en COPE' el crucial acuerdo aceptado por Israel y pendiente de la respuesta de Hamás, que afronta una fuerte presión interna

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La comunidad internacional sigue de cerca la que podría ser la única salida a la crisis de Gaza. El diplomático Gustavo de Arístegui, en 'Herrera en COPE', ha analizado el plan de paz de Donald Trump que Israel ya ha aceptado y que ahora está en el tejado de Hamás, de quien se esperan garantías y un calendario para la retirada del ejército israelí.
La encrucijada de Hamás
Según Arístegui, la organización terrorista se enfrenta a una enorme división interna. Por un lado, existen elementos muy extremos que apuestan por la "prolongación de la guerra, cuanto peor, mejor", y para los que su pueblo "siempre ha sido un escudo humano". Por otro lado, crece la presión de los casi 2,2 millones de gazatíes que, "hartos, enfermos y con ganas de que haya paz", han comenzado a protagonizar revueltas en varias zonas de la Franja.

El humo se eleva tras un ataque aéreo israelí durante una operación militar israelí en el barrio de Tal Al Hawa en la ciudad de Gaza.
El diplomático ha afirmado tener constancia de vídeos, aunque sin confirmar de manera independiente, que muestran "ejecuciones sumarísimas por parte de Hamás" a personas acusadas de colaborar con Israel, aunque en realidad solo eran críticos con la organización. A esta tensión se suma la oposición interna en el propio gobierno israelí, donde los "elementos más nacionalistas" y el propio Netanyahu no tendrían "demasiado interés" en que la paz se materialice por sus "problemas políticos, de opinión pública e incluso judiciales".
El único plan posible
Arístegui ha descrito el plan como "el primer plan serio y que suscita tanta unanimidad en los últimos 20, 25 años", calificándolo como una "razón de esperanza" no vista desde el asesinato de Isaac Rabin en 1995. Ha recordado que Hamás "tuvo la oportunidad, durante casi 3 años de negociaciones lideradas por Qatar y Egipto, de aceptar sucesivos planes de paz, todos ellos muy razonables, y siempre se levantaba de la mesa".

Humo saliendo de las ruinas de la ciudad de Gaza tras los ataques aéreos israelíes
Tras un reciente viaje a Oriente Medio, ha transmitido el sentir de fuentes con responsabilidades en la región, quienes admiten que, aunque "no es un plan perfecto", es "el único posible". Sobre quienes se opongan, estas fuentes advierten con rotundidad: "el que se oponga no tendrá ni nuestro apoyo ni nuestra amistad". Para Arístegui, es "la única salida para la tragedia humanitaria que se está viviendo en Gaza".
En este contexto, el diplomático considera "incomprensible" la postura de la "extrema izquierda europea", como la de Yolanda Díaz en España, que "se ha alineado con las tesis más bestiales del yihadismo más extremista". La única explicación posible, a su juicio, es la "coincidencia de enemigos y obsesiones": "Detestan a occidente, detestan a las democracias liberales representativas, son antiamericanas, dicen ser antiimperialistas, y, por lo tanto, ven en grupos terroristas como Hamás algo así como un nuevo Che Guevara".
Europa se blinda y Sánchez se aísla
La actualidad internacional también ha estado marcada por la cumbre informal de líderes europeos en Copenhague, donde se ha acordado la necesidad de levantar un muro de drones en el este y en el sur para hacer frente a las "violaciones continuas del espacio aéreo" por parte de Rusia. En la reunión, Dinamarca y los países del este han pedido abiertamente que España e Italia se impliquen más en la defensa del flanco oriental.
En este escenario, el presidente Pedro Sánchez se ha quedado solo como "el único que no ha apoyado abiertamente un aumento del gasto en armamento". Según se ha informado en el programa, el jefe del Ejecutivo ha intentado "burlar a Europa al pasar gasto climático como gasto en defensa", una maniobra que evidencia una España "enferma de sectarismo ideológico" y alejada de la defensa activa.
Finalmente, sobre la flotilla interceptada en Israel, Arístegui ha expresado su indignación, calificándola de "exhibicionismo más obsceno e irresponsable". Ha criticado duramente que uno de sus miembros asistiera al funeral del líder de Hezbolá y ha cuestionado la urgencia de la misión: "¿Por qué van en barco de vela durante un mes? ¿Por qué no lo llevan al puerto de Asquerón?", ha sentenciado, asegurando que estas acciones "dejan en ridículo a Occidente".
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