Schlichting: "No olvidemos que Eurovisión tiene mucho de ideológico también"

Madrid - Publicado el - Actualizado
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Por primera vez España recurre al sistema italiano de selección de la canción que nos representa. Después de años metiendo la pata, hemos reeditado el Festival de Benidorm, de la misma manera que Italia lleva a Eurovisión la canción ganadora en San Remo. El Benidorm Fest ha despertado interés, con datos de audiencia del 14 por 100 de cuota de pantalla, casi dos millones de personas viendo anoche la tele. Había un triple sistema de votación y fue el jurado y no el público el que falló a favor de esta interpretación trepidante. La canción se llama 'Slo Mo' y exige una forma física gimnástica porque cantar mientras se dan esos saltos es de un mérito envidiable.
La sorpresa de la noche fue el desbancamiento de la gran favorita, Rigoberta Baldini, el fenómeno musical indie de 2021 en nuestro país. Se llama 'Ay mamá', y es un homenaje al feminismo y la maternidad, que se presentaba en el escenario con un gran pecho en el decorado y con imágenes de la cantante embarazada. Es super pegadiza, original y seguramente hubiese enganchado ideológicamente con el movimiento Me Too y el feminismo que pega en Europa y en el mundo. No olvidemos que Eurovisión tiene mucho de ideológico también. Pero quizá fue gafada por el apoyo político. Por primera vez en la historia una ministra, Irene Montero, habló a favor de la canción, que también entusiasmaba a Gabriel Rufián, que a lo mejor gafó el tema, porque no lo votaron mayoritariamente ni el público, ni el jurado ni la representación demoscópica.