¿Tu perro no para de ladrar? Descubre cómo un adiestrador cambió la vida de Tristán y su familia

Tristán es un perro de agua que ladraba constantemente, haciendo difícil su convivencia en casa y cuando salía a dar paseos

¿Tu perro no para de ladrar? Descubre cómo un adiestrador cambió la vida de Tristán y su familia
00:00
COPE Málaga

Escucha la historia del increíble cambio de comportamiento de Tristán

Enrique Ortiz

Málaga - Publicado el

3 min lectura

Tristán es un perro de agua adorable, lleno de rizos y energía… demasiada energía. Durante un tiempo, convivir con él fue un reto: ladraba por todo, no conseguía relajarse y los paseos eran un suplicio. Su humana, Marina, lo quería muchísimo, pero estaba desesperada. "No sabía cómo ayudarlo", cuenta. Este es un caso muy común en muchos hogares: perros con altos niveles de estrés, inseguridad y ladrido excesivo. 

Seguro que conoces a alguien que también lo sufre o has visto en alguna ocasión a un perro por la calle con esa actitud. A veces, por mucho cariño que pongamos, no basta. ¿Cómo se puede reconducir a un perro con estos problemas? Ahí es donde entra en escena Adrián Navarro, adiestrador y fundador de Adiestramiento Canino Lopecan, que con paciencia y trabajo en equipo, ayudó a transformar la vida de Tristán… y también la de Marina. Ambos explican su experiencia en los micrófonos de COPE Málaga.

 SALIR A LA CALLE ERA UN MARTIRIO  

"No podía ni pasear tranquila. El paseo era un martirio, tanto para él como para mí", confiesa Marina Serón, humana de Tristán, un perro de agua de cuatro años que durante mucho tiempo vivió con una intensa ansiedad que se traducía en ladridos continuos, nerviosismo y una gran dificultad para relacionarse con otros perros. "Ladraba por todo. Si me sentaba en el sofá, ladraba. Si llegábamos al parque, empezaba a ladrar antes de bajar del coche. Me ladraba incluso si abrazaba a mi pareja", relata Marina. Una situación que afectaba a la convivencia, al bienestar del animal y a la vida cotidiana de la familia.

Ahí entró en escena Adrián Navarro, fundador del centro de Adiestramiento Canino Lopecan. Para Adrián, el caso de Tristán no es aislado: "Le pasa a muchísima gente. Adoptan un perro con la mejor intención, lo llenan de cariño, pero sin saberlo potencian conductas problemáticas. En razas como el perro de agua, con una genética especialmente sensible e intensa, eso se agrava". Tristán ya había pasado por varias fases de clases, tanto individuales como en grupo. "Empezamos ordenando su vida, estructurando una rutina que cubriera sus necesidades energéticas y trabajando en su gestión emocional. Es un perro que no se le agotan las pilas, así que hubo que ser muy constantes", explica Adrián.

 energía, emociones y socialización  

El proceso de recuperación se basó en tres áreas clave: desgaste físico, habilidades caninas para el enfoque mental y exposición controlada a situaciones sociales. Según Adrián, enseñar habilidades al perro fue clave para que "pudiera enfocar su atención en cosas que sí podía controlar, y así reducir su frustración y ansiedad". Marina también jugó un papel crucial: "Voy tres veces por semana a clases de grupo. He aprendido a leer a Tristán, a regañarle cuando toca y a premiarle cuando lo merece. Adrián no solo ha ayudado a Tristán, me ha enseñado a mí a entenderle y a cuidarle de verdad".

El adiestrador Adrián Navarro y Tristán, en una playa de Málaga

El adiestrador Adrián Navarro y Tristán, en una playa de Málaga

Hoy, Tristán es otro. "Todavía queda camino, pero ha mejorado muchísimo. Ya podemos pasear, estar tranquilos en casa, y su relación conmigo ha cambiado radicalmente", cuenta Marina, emocionada. "Es como si tuviera otro perro"

 La importancia de empezar pronto  

Ambos coinciden en que ojalá este proceso hubiese empezado antes. "Lo ideal es comenzar desde cachorro, como cuando educas a un niño. Cuanto antes, mejor", insiste Adrián. Marina lo tiene claro: "Ojalá hubiese conocido Lopecan cuando Tristán tenía tres meses. Me habría ahorrado mucho sufrimiento y se lo habría ahorrado a él también".  Hoy, Marina siente que puede disfrutar por fin de su perro. Y Tristán, ese perro que no podía parar de ladrar, también puede disfrutar de su vida.

Temas relacionados

Escucha en directo

En Directo COPE MÁLAGA

COPE MÁLAGA

En Directo COPE MÁS MÁLAGA

COPE MÁS MÁLAGA

La Linterna

La Linterna

Con Ángel Expósito

Lunes a viernes de 19:00h a 23:30h

Programas

Último boletín

18:00 H | 24 OCT 2025 | BOLETÍN

Boletines COPE
Tracking