Llegan las fiestas de Navidad y una preocupación se cierne sobre muchos hogares españoles. Qué hacemos con el jamón y los embutidos que se abren y se ponen malos al poco tiempo. Esta preocupación, que para nada es banal, puede terminar por amargarnos las fiestas, puede terminar por arruinar un aperitivo que, muchas veces cuesta un dinero que nos viene bien ahorrar. Es por ello que resulta imprescindible conocer el mejor método para poder conservar hasta una semana estos productos tan típicos que comemos en lonchas.

El secreto para que nos dure el jamón

La variedad de productos embutidos o derivados de animales como el cerdo que comemos en lonchas es muy amplia. Entre los más comunes que se consumen a lo largo de todo el año, y en especial con motivo de las fiestas, son el jamón, la mortadela, la pechuga de pavo cocido algún tipo de jamón asado e incluso si utilizamos tiras de beicon en nuestras recetas y queremos guardar el resto.

Todo este tipo de embutidos se pueden comprar tanto en las carnicerías, donde puedes elegir personalmente qué producto comprar y hablar con el carnicero para establecer el grosor del corte, o en los supermercados. Es en las grandes superficies donde se encuentran en mayor abundancia y ya cortados, lo que no impide que, una vez abiertos, puedan perder algunas de sus propiedades.

Y es que, como habrás podido comprobar en tus propias carnes (nunca mejor dicho), tras un único día de haber abierto un paquete de estos productos embutidos, de tu jamón favorito, empieza a perder propiedades. La explicación reside en que cuando la carne entra en contacto con el aire, el oxígeno comienza un proceso lento de oxidación que termina por endurecer los alimentos y endurecerlos. Un proceso lento que tiene remedio.

Cómo conservar hasta 7 días el jamón y el resto de embutidos

Lo cierto es que, aunque este proceso de pérdida de propiedades que incluso afecta al sabor de la comida no estropea al instante el producto. Resulta evidente que si dejamos el jamón fuera de la nevera y en contacto con el aire se terminará por poner malo con el paso del tiempo y no nos quedará más remedio que tirarlo. Pero es cierto que con un sólo día, siguen siendo comestibles.

Para poder poner remedio a esto, desde el portal culinario The Kitchn han establecido una lista de hasta siete métodos donde ponen a prueba el mantenimiento de los embutidos como el jamón. Entre todos ellos hay un claro ganador y que es el que recomendamos utilizar para estas fiestas de Navidad donde probablemente necesites que dure algo más que lo que la nevera permite.

Entre los métodos analizados para conservar los embutidos están:

• Guardarlo en su propio envase con autocierre
• Utilizar papel de aluminio
• Envolver las lonchas en plástico film
• Meter los embutidos en un táper de plástico
• Hacer lo propio en un táper de cristal
• Utilizar una bolsa de cierre hermético
• Y un truco viral de TikTok, que ya adelantamos no ha dado muy buenos resultados

Hasta siete días de duración si apuestas por el film de plástico

Como el mismo portal culinario explica, el mejor método es el del plástico film. Para ello lo que debemos hacer es envolver las lonchas en este papel tan popular que se vende en supermercados y tiendas de alimentación. En el mejor de los casos puedes envolver cada loncha de manera individual doblando el papel film de plástico. Si no, se puede directamente envolver el conjunto de lonchas sobrantes en este plástico que conserva la comida.

El resultado que obtendremos es que tras siete días así, en la nevera, la autora del artículo asegura que la comida estaba como si saliera de un paquete recién abierto, jugoso, sabroso y tierno. Y es así como podrás mantener tu jamón y demás embutidos que quieras consumir esta Navidad lo más fresco posible.