La espalda encorvada (más conocida como cifosis) es una afección bastante común en la población. Consiste en una curvatura exagerada hacia delante en la parte superior de la columna. Suele estar provocado por el debilitamiento de los huesos de la columna vertebral en los casos de las personas mayores. Pero, en los niños y adolescentes, pueden tener otros tipos de cifosis, que son causados por malformaciones o el aplastamiento de los huesos.

Sea cual sea el caso, una buena forma de evitar esto es manteniendo una buena postura, especialmente si somos del grupo de personas que tenemos que pasar horas sentados. Por lo que es imprescindible evitar los problemas posturales que acaben causando una curvatura en la espalda y problemas desalud posteriores.

Cómo corregir la postura

Aun siendo una lesión habitual, es posible tratarla para volver a tener la postura y forma natural de la columna, evitando de esta forma complicaciones en el futuro. La fisioterapia es una buena especialidad que puede ayudarnos mediante la práctica de diferentes ejercicios que alivian los dolores ocasionados y corregir, ya de paso, la curvatura en la columna. Existen varios ejercicios para corregir el problema de la postura. Uno de estos es hacer un rulo con una manta (una toalla también sirve) y tumbarnos con el rollo debajo de la parte de la espalda en donde la curvatura es mayor. Este ejercicio consiste en apoyarnos, intentando que la cabeza caiga lentamente, hasta que sintamos como los hombros también están cayendo.

Otro ejercicio, que también podemos hacer, es tumbarnos en el suelo sin manta o toalla, levantar los brazos hacia atrás sin mover las lumbares, manteniendo la postura.

Alivia el dolor de espalda

Tal y como estás leyendo, la espalda es una zona propensa a sufrir lesiones y dolores musculares. Esto se debe a que llevamos un estilo de vida sedentario, el estrés, el uso constante de dispositivos portátiles u ordenadores y tener un descanso ineficiente.

Algo que podemos hacer es realizar una serie de ejercicios para aliviar el dolor de nuestra espalda. El primer ejercicio consiste en hacer dominadas, que nos ayudará a construir unos buenos dorsales y fortalecer nuestra espalda. Otro ejercicio es realizarplanchas isométricas.

Otras alternativas son el peso muerto y hacer movimientos específicos en el suelo. Un ejemplo de esto sería ponernos a cuatro patas y levantar un brazo y la pierna contraria.