Línea editorial: Un mensaje para los políticos y para toda la sociedad

Uno de las grandes problemas que el Papa Francisco desarrolla en su encíclica “Fratalli Tutti” es el de la colonización cultural, unida a la perdida del sentido de la historia y la pretensión de las ideologías de construir todo a partir de cero. Y advierte el Papa sobre la necesidad de profundizar en el significado de palabras como democracia, libertad, justicia y unidad, que han sido manoseadas y desfiguradas para utilizarlas como instrumento de dominación, y que a veces se utilizan para justificar cualquier acción.

Observa Francisco que en muchos países se utiliza el mecanismo político de exasperar y polarizar, sembrando la desconfianza. “Por diversos caminos –afirma el Papa- se niega a otros el derecho a existir y a opinar y para ello se recurre a la estrategia de ridiculizarlos, sospechar de ellos y cercarlos”. Obviamente el Papa no se refiere específicamente a España, pero estas palabras, unidas a las que pronunció ante el presidente Sánchez sobre el peligro de las ideologías y la obligación de buscar el bien común y construir la patria entre todos, iluminan el momento histórico que atravesamos. Es un mensaje que sirve para los gobernantes, para los políticos de todas las tendencias y para toda la sociedad: construir la patria entre todos.