Un experto en física, sobre los puntos negros de las ventanas de los trenes: "Su función es bastante importante, porque si no la ventana se rompería por una razón muy sencilla"
El experto en física @phdresponde resuelve la pregunta de muchos alrededor de los puntos negros de las ventanas de los trenes

La función de los puntos negros de las ventanas de los trenes es importante
Madrid - Publicado el
3 min lectura
Si alguna vez te has sentado junto a la ventana de un tren, probablemente te hayas fijado en una fila de pequeños puntos negros que rodean el cristal. Están en casi todas las ventanas, pero pocos saben por qué. A simple vista parecen un adorno o un detalle de diseño, sin embargo, su papel es mucho más relevante de lo que parece: son esenciales para que las ventanas no se rompan.
Lo explica en sus redes @phdresponde, doctor en Física-Química y nanotecnólogo especializado en biomedicina, que se ha hecho popular en redes sociales por resolver dudas científicas de la vida diaria. En uno de sus vídeos más virales, el experto desvela qué función cumplen esos misteriosos puntos y por qué, sin ellos, las ventanas de los trenes acabarían agrietándose.

Las ventanas de los autobuses también tienen esta característica
“Distribuyen el calor para evitar que el cristal se rompa”
En el vídeo, el especialista muestra una ventana de tren y señala los pequeños círculos oscuros que se agrupan alrededor del marco. “Estos puntos cumplen un rol bastante importante, porque la expansión térmica del cristal y la del marco son diferentes”, explica.
El experto aclara que cuando el sol calienta la superficie del tren, el metal del marco y el cristal se dilatan a ritmos distintos. Esa diferencia de temperatura podría hacer que el vidrio se agrietase. “Lo que hacen estos puntitos es distribuir el calor de forma más uniforme, y así evitan que el cristal se quiebre o se rompa”, añade.
Además, comenta que si uno los toca con los dedos notará una ligera textura. “Ese relieve ayuda a que el vidrio quede bien fijado al marco del tren”, señala. En otras palabras, no están ahí por estética, sino por seguridad y estabilidad estructural.
Los puntos negros, conocidos como frits cerámicos, están hechos de partículas de vidrio fundido que se aplican sobre la superficie de la ventana antes de ser horneada. El resultado es un recubrimiento muy resistente, casi indestructible, que soporta altas temperaturas y protege los bordes del cristal.
Estos frits no solo sirven en los trenes. También se usan en ventanas de coches, autobuses y aviones, con la misma función: proteger el adhesivo que mantiene el cristal pegado al marco del calor y de la radiación ultravioleta. “Ese adhesivo, normalmente a base de uretano, es sensible a los rayos UV”, explican los usuarios que comentan el vídeo del físico.
El resultado es una ventana más duradera, segura y con mejor aislamiento. De hecho, las bandas negras que acompañan a los puntos tienen el mismo propósito: bloquear el sol para que el calor no se concentre en el borde del cristal.
Lo que hacen estos puntitos es distribuir el calor de forma más uniforme, y así evitan que el cristal se quiebre o se rompa"
Experto en física
Una explicación que despierta debate
El vídeo del experto ha acumulado miles de comentarios, algunos de ellos de otros aficionados a la ciencia que matizan o complementan la explicación. “Esas ventanas suelen ser laminadas, para evitar que se rompan en añicos. Y al estar laminadas, no tienes el problema de expansión por calor”, comenta un usuario.
Otro le responde: “Aunque estén laminadas, el vidrio sigue expandiéndose térmicamente. De hecho, los coches también tienen esos puntos”. El debate, lejos de restar credibilidad, ha servido para que más personas se interesen por la física detrás de los objetos cotidianos.
El éxito de este tipo de contenidos demuestra que la curiosidad científica sigue viva. Lo que a simple vista parece un detalle sin importancia —una fila de puntos en una ventana— encierra una combinación de ingeniería, física y diseño que garantiza la seguridad de miles de pasajeros cada día.

A todos nos ha surgido la duda sobre las ventanas de los trenes alguna vez
Como concluye el propio experto, “si no existieran estos puntitos, muchas de las ventanas del transporte público acabarían rompiéndose con los cambios de temperatura”. Y añade con humor: “Así que la próxima vez que viajes en tren, mira por la ventana… y dale las gracias a la física por mantenerla entera”.

                
                        
            
                    


