Imágenes virales del “catering de los horrores”: lo que comieron los policías en la cumbre de la ONU
Mientras Sevilla acoge una de las citas diplomáticas más relevantes del año, los agentes que velan por su seguridad denuncian que se les alimenta con comida “basura” y sin control sanitario

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Laura García, portavoz de JUPOL, ha denunciado con firmeza las condiciones en las que cerca de 8.000 agentes de la Policía Nacional han trabajado durante la cumbre de la ONU en Sevilla. Temperaturas superiores a los 40 grados, jornadas maratonianas de más de diez horas, hospedajes pagados de su propio bolsillo y una dieta precaria han sido las condiciones que han marcado la estancia de los agentes destinados a garantizar la seguridad del evento internacional.
García ha recorrido Sevilla en las últimas horas para comprobar personalmente la situación. “Las imágenes hablan por sí solas. Después de más de diez horas de plantón a más de 40 grados, con uniforme y chaleco, llegas a tu habitación y lo que te espera es un sándwich con una hoja de lechuga pocha y un tomate en estado lamentable”, ha asegurado. Para la portavoz sindical, ese tomate se ha convertido en un símbolo del desprecio institucional: “Ese tomate representa perfectamente lo que le importamos a Marlaska”.
“Policías que pierden dinero por trabajar”
La situación se agrava con el eterno problema de las dietas. “Llevamos más de 20 años con dietas congeladas, mientras el coste de la vida no ha dejado de subir. Es imposible encontrar alojamiento por 48 euros en lugares como Sevilla, Málaga o Ibiza”, ha subrayado García. Como consecuencia, muchos agentes acaban durmiendo en garajes o balcones, como ya ocurrió en años anteriores.
En comparación, el Ayuntamiento de Sevilla ha destinado 700 euros por agente municipal durante la cumbre, mientras que los policías nacionales, en muchos casos, han recibido tan solo 28 euros, cuando no han tenido que costear ellos mismos su alojamiento. “La balanza está tan desequilibrada que nos parece un insulto. Todos trabajamos las mismas horas, en el mismo calor, con el mismo riesgo. ¿Por qué esta discriminación?”, se ha preguntado García.
Para JUPOL, esta situación vuelve a poner de manifiesto la necesidad de una equiparación salarial real. “No pedimos nada más que a igual trabajo, igual salario y condiciones. Lo que ocurre es que nos han tomado la medida, les gusta maltratarnos, tratarnos como policías de segunda, y esta vez ya ni siquiera ocultan el desprecio”, ha declarado con rotundidad.
“Esto no es comida, es basura”
La indignación ha alcanzado su punto máximo con el llamado “catering de los horrores”, como lo califica la portavoz. Bolsas de patatas fritas servidas en envases de congelado, bocadillos en mal estado y comida “infumable” han sido denunciados en redes sociales por los propios agentes desde el pasado jueves, y las imágenes han corrido como la pólvora.
“Queremos saber quién ha sido el responsable de este despropósito. Esto no es solo una humillación, sino una posible amenaza a la salud. Queremos conocer la licitación, a qué empresa se ha contratado, cuánto se ha pagado y quién firmó ese contrato”, ha explicado. Según García, todo apunta a que “alguien les dijo que dieran de comer a nuestros compañeros por tres euros al día”.
La portavoz de JUPOL ha confirmado que se exigirán responsabilidades y explicaciones. “Esto no puede volver a pasar. Hoy, el señor Cerdán come mejor que cualquier agente desplegado en Sevilla. Y eso no puede ser”.