Arturo Ros: "Son tiempos recios pero el Evangelio tiene mucha fuerza"
En la víspera de su toma de posesión, el nuevo obispo de Santander explica en La Linterna de la Iglesia los primeros pasos que dará al frente de la diócesis

Arturo Ros: "Son tiempos recios pero el Evangelio tiene mucha fuerza"
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Arturo Ros tomará mañana posesión como nuevo obispo de Santander. Esta noche nos ha atendido en los micrófonos de La Linterna de la Iglesia para explicarnos los retos a los que va a enfrentarse como pastor de esta diócesis.
Al comienzo de la entrevista, Ros explica como nació su vocación: “Lo de la banca fue una propuesta de trabajo que surgió cuando tenía dieciséis años. Acepté pero desde pequeño estuve vinculado a la vida parroquial. La llama de fe siempre estuvo viva. Venía de una familia cristiana donde siempre he vivido mi fe. Tenía futuro laboral pero no me costó renunciar. Nunca me arrepentí”.
Arturo Ros explica en COPE lo que deja atrás tras sus años como obispo auxiliar de Valencia: “Valencia es mi vida. Al mismo tiempo acepto el cambio con naturalidad. El nombramiento es muy superior a mi capacidad pero me fío de la Iglesia. Dejo en valencia muchos rostros. He recorrido toda la Diócesis y me llevo recuerdos preciosos para siempre. A ese cariño no le pongo final. Me llevo muchas cosas buenas y han sido años de aprendizaje. Mi aliento siempre ha sido por los fieles. Ellos han sido siempre mi descanso y mi fuerza. Dejo el deseo de haberlos servido”.
El nuevo obispo de Santander reflexiona sobre sus años de servicio a la Iglesia: “Soy un hombre de Iglesia. Mi fe es firme y profunda y me hace muy feliz. Llevo una vida entregada y eso es un gozo inmenso. Vengo de una familia muy humilde. He sido con mi padre agricultor y eso marca un carácter de espíritu solidario. Teníamos un plato siempre preparado por si venía alguien a comer. Creo que no soy una persona muy complicada”.
Arturo Ros también asegura que los retos a los que se enfrenta la Iglesia son comunes en todo el mundo y al mismo tiempo apasionantes: “Hay muchas esperanzas y eso es lo que me inquieta si seré capaz de responder. Hoy en día no ha ningún sitio fácil. Los retos de evangelización están en todos sitios igual pero la esperanza es firme. Son tiempos recios pero el evangelio tiene mucha fuerza y eso tiene recorrido siempre. Ahora deseo encontrarme con los curas lo más pronto que pueda. Quiero conocer las parroquias y vivir con ellos. Los retos pastorales son comunes pero mi reto es conocerles y quererles, caminar con ellos”.
Ros también se ha referido al Sínodo que ha vivido la Iglesia en los últimos meses: “El Sinodo es un acierto de espíritu y de alma del Papa Francisco. El papa ha querido escuchar y el camino es ese. Vamos a caminar juntos. Cada uno tiene su papel y tenemos que apostar más fuertemente por el laicado, tienen que ser protagonistas del presente”.
El nuevo obispo de Santander es también el presidente de la Subcomisión Episcopal para la Juventud y la Infancia desde marzo de 2020. Por ello ha querido tener unas palabras dedicadas a los jóvenes: “Sorprendió la participación en la JMJ porque se tiene una visión limitada de los jóvenes. Aquello era una fiesta. Es el gozo de la fe. Ellos nos dan una lección impresionante. Hay que confiar en los jóvenes hay que hacerles protagonistas de la historia y hay que quererles y estar a su lado. Tenemos mucha gente joven admirable y hay mucha esperanza”.
Por último, Arturo Ros nos ha contado la Iglesia con la que él sueña: “Sueño la Iglesia que quiere el Señor. Los sueños particulares están un poco torcidos. Le ponemos límites y topes. Queremos una Iglesia que no tenga miedo y que acepta nuevos retos. Una Iglesia que se entrega”.



