Después de más de un año de baja por una lesión de rodilla, Ricky Rubio volvía a la cancha, con su equipo, los Cleveland Cavalier, en enero pasado. Ilusionado. Con ganas. Incluso, en los primeros días de agosto se incorporó a la concentración de la Selección Baloncesto para preparar, con el resto del grupo, el mundial que empieza en diez días. En Indonesia, Filipinas y Japón. Y de pronto, todo cambió.

Ricky Rubio deja el baloncesto, de momento, para curar su salud mental. Así lo ha dicho. Hace un parón para calmar el ánimo y resetear la cabeza. Lo cierto es que, hace unos años quizás no, pero hoy sabemos que preservar la salud mental no es ninguna broma. Cada vez son más los personajes públicos con trayectorias impecables que reconocen que tienen problemas mentales. Simone Biles, por ejemplo, es una del ellas. Se retiró en 2021 para centrarse en su salud psicológica porque dejó de disfrutar en lo que hacía.

Fernando Sarrais es psiquiatra, y profesor de psicología en la Universidad de Navarra. Ha pasado por los micrófonos de 'Herrera en COPE' para hablar sobre la importancia del cuidado de la salud mental y las señales que van apareciendo por el camino. "Todos tenemos una mente y un cuerpo. El cuerpo enferma, lo hemos visto con el covid, y la mente también. Todo el mundo tiene más pudor de hablar de estas enfermedades", ha arrancado el experto en su discurso.

Añadía que la primera señal, desde el punto de vista del propio sujeto, es el sufrimiento. "Cuando no saben por dónde empezar, les pregunto si están sufriendo psicológicamente, mucho y de modo continuo", indica.

"Hay miedo a sufrir y cuando aumenta este miedo, aparece la angustia"

Las patologías mentales que están aumentando porque "aumentan las tres emociones básicas negativas: el miedo, la ira y la tristeza. Cuando se incrementa el miedo y el estrés, existe una ansiedad provocada por el entorno". Explicaba que hay miedo a sufrir. "Y cuando aumenta este miedo aparece la angustia que es insoportable y lleva a huir. Como el miedo al ascensor. Gente que se cree que se va a ahogar, o tener un infarto. Que también se llama pánico".

Por último, ha explicado que es importante tener en cuenta la necesidad de cuidar la salud mental durante el año. "La gente llega tan agotada a las vacaciones que no pueden hacer nada para descansar. Hay que intentar tener un equilibrio".