Un ingeniero de montes explica qué son los incendios de sexta generación y por qué apagarlos es tan complicado: "Aumentan su peligrosidad"
El decano del Colegio Oficial de Ingenieros de Montes, Eduardo Tolosana, revela en 'Herrera en COPE' cuáles son los motivos de estos incendios y qué medidas sería necesario implantar para evitar nuevos focos a futuro

Escucha la entrevista completa a Eduardo Tolosana, en 'Herrera en COPE'
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España está viviendo un verano crítico en materia de incendios forestales. El fuego no está dando tregua y ya ha dejado cuatro víctimas mortales y decenas de heridos, algunos en estado crítico por las quemaduras.
El sistema europeo Copérnicus ha informado de los siguientes datos: la superficie afectada llega casi a las 350.000 hectáreas. La inmensa mayoría de esas hectáreas han sido pasto de las llamas en este mes de agosto, ya que la cifra, a 29 de julio, era de 41.903 hectáreas, pero, a partir del día 7, el recuento de hectáreas iba por 47.302 por lo que se ha disparado en los últimos días.

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Las causas detrás del desastre
En Herrera en COPE, se ha contado con la intervención de Eduardo Tolosana Esteban, decano del Colegio oficial de Ingenieros de Montes. Su opinión ha ayudado a entender por qué estos incendios están siendo tan devastadores, ya que explicó los factores que están haciendo que vivamos un verano podría ser definido a través de estos desastres.
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Tolosana señaló que "más allá de las causas inmediatas que conocemos, como la primavera lluviosa, ese abundante combustible fino y matorral, y las olas de calor desde la temprana de junio, pero yo diría que hay otras causas generales".
Entre ellas destacó al cambio climático, afirmando que "alarga la duración de la época de riesgo, que nos causa más olas de calor, más temperatura y más duración. Pero es difícil de abordar de forma inmediata".
Asimismo, el experto también dirigió la atención hacia el abandono rural, ya que este provoca que se acumulen grandes cantidades de combustible fácilmente inflamable. Sin embargo, a diferencia del cambio climático, para esta causa "sí que tenemos soluciones más posibles localmente y a corto o a medio plazo".
Inversión escasa en prevención
El decano criticó la poca inversión en prevención, explicando que es un factor clave para que estén aumentando las posibilidades de grandes incendios en el territorio.
Tolosana sacó a la luz que "según los informes de la Asociación de Empresas Forestales, esta inversión ha decrecido en gran medida y prácticamente no hay ayudas a los propietarios particulares de Montes, que representan el 70% de los bosques en España".
Para Tolosana, otra opción menos costosa sería fomentar la gestión sostenible de la madera y la biomasa, ya que pudiera ser un tipo de "antídoto" eficaz contra los incendios.
Para ello, el representante del Colegio oficial de Ingenieros de Montes utilizó el ejemplo de Francia: "Se está obligando a que se utilice la madera en la construcción de edificios públicos. Este tipo de medidas no solo ayudan a reducir el riesgo de grandes incendios, sino también al desarrollo rural y a la transición ecológica, sustituyendo los materiales no renovables y los combustibles fósiles".

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Algo que tampoco está ayudando a que se apaguen los incendios actuales es la propia dinámica de los fuegos. Tolosana señaló que las consecuencias de un pequeño número de incendios, es que se terminen quemando la mayor parte de la superficie afectada.
El experto lo explicó a través de un ejemplo claro: "El año pasado uno de cada cuatrocientos incendios quemó el 59% de la superficie total. Estos incendios superan la capacidad de extinción incluso de los equipos más profesionales".
Incendios de sexta generación
Los incendios de sexta generación, conocidos por tener la capacidad de crear su propia meteorología. En este sentido, el decano aclaró que “no todos los grandes incendios son de sexta generación, pero estos sí crean condiciones especiales, como vientos en las columnas de aire, que dificultan prever su comportamiento y aumentan su peligrosidad”.
Una llamada a la acción
Mientras las autoridades continúan trabajando en la extinción de los fuegos, la recomendación de Tolosana es clara: aumentar la inversión en medidas preventivas, fomentar la gestión sostenible y mantener la alerta constante.
Esta preocupación está justificada, ya que los incendios no solo están devastando miles de hectáreas, sino que también ponen en peligro la salud de la vida humana y a la estabilidad de las comunidades autónomas en riesgo. La respuesta de los gobernantes será clave para poder afrontar estos fenómenos, que cada vez se producen con más frecuencia y con mayor intensidad.