La Copa del Rey transforma Irun en capital del balonmano

Irun será el centro del balonmano del 7 al 9 de junio, con la celebración de la fase final de la 50ª edición de la Copa del Rey en Artaleku. Con ocho equipos clasificados y todas las entradas agotadas, el torneo aterriza por primera vez en Gipuzkoa. 

Un formato único y una sede con historia 

El Polideportivo Artaleku, con 1.943 localidades, acoge por primera vez la fase final de la Copa del Rey de balonmano, un torneo que este año alcanza su 50ª edición y que ofrece, además del título, una plaza europea para la EHF European League y la clasificación para la Supercopa Ibérica. El formato vuelve a ser el de ocho equipos, con cuartos de final el viernes, semifinales el sábado y la gran final el domingo a las 18:00 h.

Artaleku ha vivido grandes noches europeas con el Club Deportivo Bidasoa, ha albergado finales de Copa de Europa y Recopa, y ahora suma una cita que ha despertado gran interés en la ciudad. Las entradas se agotaron en cuestión de días y hay 93 profesionales acreditados por los medios de comunicación. La organización ha tenido que habilitar una sala de prensa adicional para atender la demanda. 

El Bidasoa, anfitrión con aspiraciones

El Irudek Bidasoa Irun participa como anfitrión y se medirá el viernes a las 20:45 h ante el Bathco Torrelavega. El conjunto guipuzcoano llega tras una temporada exigente en La Liga Plenitude ASOBAL y con la ambición de pelear por el título. En caso de avanzar, disputaría la semifinal del sábado a las 19:30 h.

Junto a Bidasoa y el vigente campeón, el FC Barcelona, también participan Ademar León, Logroño, Huesca, Alcobendas, Atlético Valladolid y Torrelavega. La Copa mantiene su atractivo por ofrecer una vía alternativa hacia Europa, especialmente para equipos que no logren la clasificación vía liga. 

Artaleku, símbolo del pasado... y del futuro pendiente

Pese al entusiasmo, la celebración de este evento también ha vuelto a poner sobre la mesa la urgencia de renovar Artaleku. La instalación, inaugurada en 1987, arrastra deficiencias estructurales y limitaciones para acoger eventos internacionales. La moratoria concedida por la EHF está cerca de expirar y la necesidad de un nuevo polideportivo multiusos en Irun o Ficoba es ya un consenso político sin concreción presupuestaria.

El Bidasoa podría verse obligado a abandonar Artaleku para sus partidos europeos en un futuro próximo, si no se avanza en la financiación de la nueva infraestructura. La efeméride de la Copa, más allá del espectáculo, reaviva el debate institucional y ciudadano sobre el futuro del balonmano guipuzcoano. 

Minicopa, actividades y ambiente festivo

Paralelamente al torneo principal, se celebra una Minicopa cadete en Pasai Donibane y Lezo, con la participación de los ocho clubes representados en la fase final. Además, la plaza San Juan de Irun se ha convertido en el centro de la fanzone, con música, comercio local y la actuación de artistas como Los Niños Jesús, grupo liderado por el periodista Jordi Évole.

Exjugadores internacionales como Raúl Entrerríos, Nerea Pena o Tomas Svensson han participado en jornadas de tecnificación por todo el territorio guipuzcoano. El objetivo: consolidar el legado de este evento como una palanca de promoción del balonmano en toda la provincia.