El secreto de la longevidad de Felisa, una anciana centenaria de Ourense que lleva sus cuentas económicas y trabaja en dos fincas
La centenaria cuenta, en los estudios de COPE Ourense, su secreto y no pasa inadvertido

Felisa, vecina de 101 años de Irixo
Ourense - Publicado el - Actualizado
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Felisa es natural de la localidad ourensana de O Irixo, tiene 101 años y se levanta cada día con una sonrisa. Esta centenaria lleva sus cuentas económicas, se vale por sí misma y trabaja dos fincas cuyos productos reparte entre familia y vecinos.
La centenaria gallega estuvo en los estudios de COPE Ourense contando cuál es su secreto de la longevidad y cree que se encuentra en “trabajar mucho, comer sano, no tomar alcohol ni sal”.

Felisa estuvo en los estudios de COPE Ourense
Se levanta cada mañana sobre las 08:30 y desayuna siempre leche con ColaCao y pan. Tras su desayuno, se va a trabajar a una finca y allí habla con vecinos. Entre las 13 y las 13:30 horas, regresa a casa donde prepara la comida. A Felisa le gusta comer “más carne que pescado” además de verduras y huevos de casa. Luego, duerme una siesta y vuelve a trabajar en las fincas hasta las 20 horas que regresa para cenar, ver la televisión y acostarse sobre las 23 horas y relató que duerme “muy bien”.

La historia de Felisa contada por Juan Maceiras
TOMATES DE MÁS DE MEDIO KILO
En una entrevista en los estudios de COPE Ourense, Felisa manifestó que lleva “mis propias cuentas económicas porque sé lo que gasto y me decidí hace poco a comprar una finca”. En las dos fincas que trabaja actualmente, siembra varios productos como “ajos, patatas, repollo, judías o tomates que el año pasado pesaban más de medio kilo”. Varios productos del campo los reparte entre sus familiares y vecinos del pueblo porque “todos me quieren mucho y están pendientes de mí porque siempre tuve muchos amigos” resaltó la centenaria.

Productos que siembra Felisa
VIDA DIFÍCIL
Felisa manifestó que toda la vida trabajó mucho en el campo y vendía junto a su marido en las ferias ya de joven productos de la huerta y huevos. La familia tuvo vacas y gallinas para salir adelante porque la vida no fue fácil para ella. Se quedó viuda con menos de 40 años y tuvo que sacar adelante a su hijo de 14. “Mi marido fue a la guerra, cayó herido en la Batalla del Ebro, le rompieron las dos piernas y luego murió” relató Felisa, quien señaló que nunca se planteó ir a la emigración, como fue habitual para varias familias de gallegos.

La centenaria en una de sus fincas
“Yo quería cuidar a mi hijo porque ya mi marido, que perdió a su madre a los seis años, me pedía que nunca lo abandonara para irme a trabajar en la emigración”, quien contaba emocionada que su hijo “siempre fue muy amigo de sus amigos como su padre”. Con la fuerza de su trabajo, cuidó a su hijo y le pagó sus estudios en Ourense y posteriormente en Madrid. Con mucho orgullo, relató que su hijo fue Inspector de Policía en Ourense.
Felisa trabajó en su vida varias fincas anteriormente con centeno, trigo y maíz. La centenaria, a la que siempre le gustó más trabajar en las fincas que de ama de casa, parte la leña a su edad y todavía afila la aguja “y con hilo blanco no necesito gafas, solo las necesito con hilo negro y además tengo máquina de coser” señaló.

La centenaria de O Irixo con sus tres bisnietos
A la mujer de 101 años le gusta estar en contacto con su nuera, sus nietas, amigos y vecinos y habla con muchos por teléfono manteniendo el contacto con ellos. “Siempre hablé mucho con familiares, amigos y vecinos porque tuve muchas amistades en mi vida y el estar en contacto con la gente me aportó mucha felicidad en mi vida”

Felisa a su llegada a los estudios de COPE Ourense
REGALO ESPECIAL
La fiesta de 100 años fue muy especial. Familia y amigos le prepararon una celebración con momentos muy emotivos y regalos tan especiales como una azada para seguir trabajando las fincas.

La centenaria siempre dedicó su vida a trabajar las fincas
Felisa cree que su longevidad puede ser también genética ya que “mi abuelo tenía 90 años cuando murió y toda la dentadura perfecta”. Además, oye y ve muy bien y destacó que “otras son más jóvenes y no oyen ni ven como yo”. Es muy religiosa, va a misa todos los domingos y reza todos los días. Su mente siempre está despierta porque nos contó que “me acuerdo de todo tanto de hace muchos años como de ahora” y resaltó que ve programas de televisión en los que ejercita la mente.

La mujer de 101 años, Felisa, con una de sus nietas, Marar, que la acompañó a los estudios de COPE
La mujer de 101 años de O Irixo disfruta de la vida y siempre se levanta con una sonrisa para afrontar cada día con todo cariño en las fincas que son para ella una verdadera pasión.