Los Soletes Repsol ilumina Badajoz: Neo Dadá y Mentidero, éxito en lo suyo
La cafetería Neo Dadá y el restaurante Mentidero han sido galardonados por su originalidad, la pasión por su oficio y su capacidad para crear una experiencia única

Badajoz - Publicado el
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Badajoz suma dos nuevos reconocimientos en su sector hostelero con la concesión de un Solete Repsol a la cafetería Neo Dadá y al restaurante Mentidero. Este galardón de la Guía Repsol premia a establecimientos con encanto, una propuesta atractiva y un precio asequible, reconociendo la pasión y la constancia detrás de cada proyecto.
Una sorpresa inesperada
Para Pepe Gutiérrez, responsable de la cafetería Neo Dadá, la noticia fue toda una sorpresa. Según relata, se enteró de manera informal a través de las redes sociales y las llamadas de los amigos: "Fue una gran sorpresa", aunque al principio no se lo querían creer. Gutiérrez considera que este reconocimiento valora "el servicio, una trayectoria, un local emblemático" y, sobre todo, "el cariño que le ponemos".
La clave: especialización y pasión
A diferencia de otros locales, Neo Dadá no basa su oferta en un menú gastronómico, ya que "No tenemos cocina por espacio", explica Gutiérrez. Su fortaleza reside en una cuidada selección de bebidas y en su capacidad para adelantarse a las tendencias, moviéndose, viajando y observando constantemente el mercado.

Neo Dadá
"Cuando nos metimos en el Gin tonic, acabamos siendo referentes a nivel nacional", recuerda Gutiérrez sobre una época en la que llegaron a tener 99 referencias distintas. Ahora, adaptándose a los nuevos hábitos de consumo, han puesto el foco en el vermú, respondiendo a una demanda de "menos alcohol, menos trago largo".
La mayor satisfacción para Pepe Gutiérrez es ver a los clientes disfrutar. "Me sale una sonrisa de oreja a oreja cuando escucho que alguien está disfrutando con el café o alguno de los licores que les hemos servido", confiesa. Esa pasión es el motor que le impulsa a seguir, un gusto por el oficio que aprendió de su padre y que intenta transmitir a los más jóvenes.
Soy un apasionado, por no decir un enamorado, de lo que hago, y para mí eso es lo más importante"
Café Neo Dadá
Esta dedicación es el motor que le ha mantenido tras dos décadas en la misma esquina, un lugar que se ha convertido en parte de la vida de la ciudad. Con nostalgia, Pepe Gutiérrez comenta lo que significa para él: "Veinte años en el mismo sitio, en la misma esquina de la Plaza de la Soledad. Veinte años viendo crecer a niños que venían a saltar encima de las mesas y que ahora vienen a tomar copas con sus amigos".
Veinte años en el mismo sitio, en la misma esquina"
Café Neo Dadá
Para quienes no lo conozcan, define Neo Dadá como "un local pequeño, con encanto, muy tranquilo, casi sin música, donde venir a olvidarse del móvil por un rato". En definitiva, un espacio pensado para "disfrutar de una copa bien puesta".



