Paro obligatorio y controles imposibles en Alicante: el futuro incierto del arrastre mediterráneo

La Cofradía de Pescadores de Villajoyosa ha expresado su profunda preocupación y rechazo al acuerdo alcanzado por la Unión Europea sobre los días de pesca en el Mediterráneo para 2026. Desde el sector aseguran que lejos de aportar estabilidad, el pacto perpetúa la precariedad del arrastre mediterráneo y pone en riesgo el futuro de la flota y del empleo en los puertos alicantinos. 

El acuerdo obliga a los pescadores a parar 92 días al año, lo que supone consumir el paro de forma obligatoria y dificulta la continuidad de las tripulaciones y el relevo generacional. Desde la Cofradía advierten de que los 143 días de pesca autorizados están muy por debajo de los 180 que consideran mínimos para garantizar la viabilidad económica de las embarcaciones.

A esta situación se suma el endurecimiento del control y del régimen sancionador, que entrará en vigor el 10 de enero de 2026. Los pescadores deberán estimar, antes de entrar a puerto, el peso de todas las especies capturadas desde el primer kilo. Una exigencia que califican de materialmente imposible, debido al movimiento del barco, la falta de sistemas de pesaje a bordo y los horarios de entrada a puerto, lo que podría derivar en sanciones constantes.

Otro de los puntos más criticados es que el acuerdo vuelva a ser anual, sin ofrecer un marco estable a medio o largo plazo. Una incertidumbre que impide planificar inversiones, mantener empleo y garantizar el futuro de un sector clave para la economía y la identidad del litoral alicantino.

Desde la Cofradía de Villajoyosa lo resumen con un mensaje claro: menos días de trabajo, más paro obligatorio y más presión administrativa. Y lanzan una advertencia contundente: “Sin pescadores no hay puertos, no hay pesca y no hay Mediterráneo”.