Asturias contará con la primera agencia para víctimas con discapacidad

La Fundación Vinjoy pone en marcha en Asturias un proyecto pionero en España para proteger y acompañar a personas con discapacidad que han sufrido violencia, especialmente de tipo sexual. Se trata de la Agencia de Soberanía Individual, un recurso innovador que ofrece apoyo integral a las víctimas: desde la toma de decisiones iniciales hasta su reconstrucción personal, pasando por el proceso judicial si lo hubiera.

Acompañamiento

“La Agencia parte de la idea de que cada persona es soberana, dueña de su vida y de su cuerpo”, ha dicho en COPE Asturias el gerente de la Fundación Vinjoy, Adolfo Rivas. El proyecto se dirige especialmente a personas con discapacidad intelectual o psicosocial, un colectivo con mayor exposición a situaciones de abuso. En muchos casos, la víctima no comprende del todo lo que está viviendo y necesita un acompañamiento constante.

La Agencia no se limita a intervenir cuando hay una denuncia: actúa antes, durante y después, con un enfoque que combina apoyo psicológico, asesoramiento jurídico e intervención socioeducativa.

Uno de los puntos fuertes del proyecto es su estructura coordinada con instituciones públicas y cuerpos de seguridad. Rivas ha subrayado el papel de la Guardia Civil y la Policía Nacional, que desde hace tiempo pedían herramientas eficaces para abordar estos casos. “Quieren hacerlo bien, pero necesitaban un recurso especializado que garantice que las víctimas no están solas”, afirma.

El trabajo conjunto también incluye a juzgados, servicios sociales y profesionales del ámbito educativo, en una red que permite ofrecer una atención completa y sostenida en el tiempo. La Agencia ya está en funcionamiento y se inaugurará oficialmente el próximo 12 de junio.

conciencia social

Más allá de la atención directa, el proyecto busca reducir la impunidad y visibilizar estas situaciones. “El mero hecho de saber que existe un recurso disminuye mucho la posibilidad de que estas situaciones se repitan”, destaca Rivas.

Y lanza un mensaje claro y directo: “Esto no lo vamos a consentir. No se trata solo de la víctima. También los vecinos, los amigos, los compañeros... Todos tenemos la responsabilidad de actuar y orientar. Saber que hay un recurso eficaz ya es una forma de protección”.