Detenidos dos implicados en el acoso a la directiva del Sevilla F.C.
La Policía Nacional ha arrestado a dos personas e identificado a 13 usuarios de redes sociales por las amenazas y el hostigamiento sufrido por la cúpula sevillista en abril, después de un encuentro en el Ramón Sánchez-Pizjuán.

Declaraciones de Sara Talaván, portavoz de la Policía Nacional, sobre las detenciones e identificaciones en la operación Sopaipa.
Sevilla - Publicado el
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La Policía Nacional ha detenido en Sevilla a dos personas por su presunta implicación en los delitos de desórdenes públicos y amenazas cometidos contra miembros de la directiva del Sevilla Fútbol Club, en el marco de la operación Sopaipa (fase II). Los hechos se produjeron en abril, al término del partido de liga que enfrentó al equipo hispalense con el Atlético de Madrid.
Según ha detallado el Cuerpo, estos incidentes generaron una gran alarma social debido a que las imágenes se difundieron masivamente en redes y medios, mostrando cómo los directivos eran increpados y acosados por un grupo de personas en los alrededores del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán. En la secuencia, los responsables del club tuvieron que refugiarse a la carrera en el interior de las instalaciones mientras se les arrojaban objetos y se les proferían insultos.
La investigación, desarrollada por la Brigada Provincial de Información, ha permitido identificar a 13 usuarios de redes sociales que vertieron amenazas contra la cúpula sevillista tras los incidentes. Asimismo, se ha procedido a la detención de dos de los principales implicados, aunque la operación continúa abierta y no se descartan nuevas actuaciones.
La portavoz de la Policía Nacional, Sara Talaván, ha explicado que estos hechos se produjeron “justo cuando los directivos intentaban abandonar el estadio” y que se trató de un episodio de gran violencia, con una masa de personas que persistió en su protesta hostil, uniéndose incluso viandantes que no dudaron en continuar el acoso.
La actuación policial forma parte de un dispositivo específico para combatir la violencia en el deporte y garantizar la seguridad de jugadores, directivos y aficionados. Desde la Policía Nacional se recuerda que este tipo de conductas pueden derivar en penas de prisión y conllevan sanciones administrativas, como el prohibir la entrada a recintos deportivos durante años.