La selección española de baloncesto se enfrentará este martes a Polonia en los cuartos de final del Mundial de China, cruce al que concurre como favorita y muy concienciada para confirmar su mejoría y sacar adelante un partido que también puede tener mucha importancia en clave olímpica.

Desde que ganó el oro en Japón hace 14 años, España no ha vuelto a disputar una semifinal mundialista y ahora se ha ganado un oportunidad inmejorable para romper su 'muro' de cuartos tras la exhibición defensiva que completó ante Serbia y que supuso el espaldarazo que buscaba en China.

Grecia en 1998, Alemania en 2002, Serbia en 2010 y Francia en 2014 forman parte de esa peculiar 'lista negra' española en la que quiere ingresar Polonia, una de las dos selecciones revelación del torneo junto con República Checa. Ambas figuran entre las ocho mejores viendo cómo se quedaban en la cuneta selecciones como Grecia, Brasil, Lituania o Italia.

En la carrera por las medallas también sigue España con una progresión brillante: de los apuros en la primera fase ante la modesta Irán al clínic defensivo ante la poderosa Serbia, pasando por la importante victoria ante Italia. Un camino que le ha permitido llegar al momento clave con un panorama soñado, ya que Estados Unidos y la propia Serbia transitan por la otra parte del cuatro.

En cuanto a los Juegos Olímpicos, las dos primeras selecciones europeas en el Mundial sacarán billete para Tokio y un triunfo ante Polonia aclararía el panorama, ya que Francia y República Checa se medirán con Estados Unidos y Australia, respectivamente, mientras que Serbia lo hará con Argentina. Si España gana y caen dos de sus tres vecinas europeas, habrá cumplido su principal misión en China.

Sin embargo, todas esas cábalas serán papel mojado si no cumple su parte del trato, esto es, sumar su vigésima victoria consecutiva ante Polonia, que ya le dio un aviso en el Eurobasket 2015. En aquel cruce de cuartos, logró mantener el duelo equilibrado hasta el último cuarto, cuando emergió el 'triplista' Pau Gasol (6/7 desde la distancia aquel día) para evitar cualquier conato de sorpresa (80-66).

La selección polaca, que afrontar este cruce sin presión, sumó victorias ante Venezuela (80-69), China (76-79), Costa de Marfil (63-80) y Rusia (79-74), pero cayó con estrépito ante Argentina (65-91) en su último encuentro. Sus máximos anotadores son dos conocedores del baloncesto español, Adam Waczynski (Unicaja) y Mateusz Ponitka (ex del Tenerife), mientras que la dirección de juego corre a cargo de A.J. Slaughter, que acaba de fichar por el Real Betis.

El base de origen estadounidense tendrá la difícil misión de frenar a Ricky Rubio, el máximo anotador de la selección española, mientras que el jugador más valorado es Víctor Claver, cuyo sacrificio y polivalencia se han convertido en la metáfora del rendimiento coral del equipo español. Si España confirma su favoritismo ante una selección sin ningún jugador NBA, topará en semifinales con Australia o República Checa.