El chef asturiano José Andrés ha sido reconocido como Huésped Distinguido de Salamanca por su trayectoria de más de tres décadas exportando la marca España por todo el mundo y sobre todo por su faceta solidaria a través de su organización "World Central Kitchen", que abastece de comidas a zonas del mundo afectadas por desastres naturales o bélicos.

El propio chef ha reconocido que se ha visto sorprendido por este nombramiento ya que él sólo estaba en Salamanca para "hacer negocios" y se ha mostrado muy agradecido por la distinción, que ha querido trasladar al resto de su equipo y de las personas que trabajan a su lado.

"Al final yo no soy el individuo, yo soy la suma de muchas personas que han invertido toda su vida en hacerme a mí un poquito mejor. Soy el producto de todos esos años, de gente que lo ha dado todo por hacerme a mí un poco mejor", ha expresado José Andrés.

En un acto en el ayuntamiento salmantino, su alcalde, Carlos García Carbayo, ha destacado las más de tres décadas que el cocinero lleva en su "conquista" del mercado y la cultura de los Estados Unidos, luchando para evitar que se desperdicien alimentos o en que no se tome a la ligera el cambio climático, entre otras cuestiones.

En el reconocimiento del cocinero como Huésped Distinguido se incide en que es trata de un otorgamiento dirigido a aquellos que visiten la ciudad por su notoria autoridad, gran sabiduría, bondad de corazón o nobles hechos y que hayan ganado o merecido aprecio.

El edil ha insistido además en la labor humanitaria de la 'World Central Kitchen' con la zona afectada por el conflicto entre Palestina e Israel como punto en el que está centrado en este momento.

Por su parte, el chef se ha referido a sus visitas a distintos rincones de España, por ejemplo al pueblo salmantino de La Alberca, en los que sus gentes y todos los platos y creaciones gastronómicas le hacen ver que "no sabe nada" en realidad de cocina española aunque se le tenga por un experto.

"La gastronomía une, crea empleo, ayuda a que las economías locales realmente crezcan, ayuda a que las ciudades conecten con el campo, un campo que muchas veces tenemos muy olvidado y que hay que nunca olvidarse de ello, porque el campo es el reflejo de quiénes somos nosotros. Y al final donde la gastronomía realmente es una forma maravillosa de entender el mundo", ha dejado como mensaje.