José Luis Restán, director editorial de COPE, nos recuerda que 'de toda la vida han existido en las diócesis la figura del exorcista quee es una figura contemplada por el Derecho Canónico'.

Tiene que quedar claro que 'la Iglesia siempre ha contemplado y siempre ha creído en su doctrina que existe un poder del mal, que existe el maligno, que existe el demonio'.

'La Iglesia sabe que el mal existe, no le asusta, está en el Evangelio, en la tradición de la Iglesia, en la predicacion de Jesus de Nazaret, que quizás en este  momento  haya la sensacion de que haya mayor número de casos y que se plantean estas situaciones y por eso la Iglesia prevé que haya sacerdotes especializados y con un nombramiento para afrontar estas situaciones. Eso lo que ha pasado en Madrid'.

Por otro lado asegura que 'sí es cierto que existe una serie de situaciones que están en la fronteroa entre lo psicótico, situaciones que los propios psiquiatras no son capaces de atender en las que entran en cuestión temas espirituales profundos donde se ve un poder del mal que es ciertamente inquietante y sí merece respeto y que muchas veces se ve como duda o necesidad a la Iglesia'.

Alejandro Arellano, prelado auditor del Tribunal Apostólico de la Rota Romana nos explica el motivo por el que el tema del exorcismo levanta cierta expectación 'obedece que se ha suscitado a que las catequesis, la predicación y la enseñanza teológica normalmemte evitan el tema y el resultado es un desconocimeinto de la doctrina de la Iglesia sobre esta materia'.

'Tenemos que partir del creciente secularismo presente en las capas de la sociedad  que conlleva a una profunda crisis de los principiosy  valores reliogisios y éticos y en una pérdidad del verdadero sentido de la vida, y esto favorece el recurso a  los medisos de adivinación, del ocultismo, magia, supersticiones'. 'Las respuestas al exorcismo no puede ser el rechazo automático  y tampoco la credulidad de quien ve en el exorcismo siempre un posible remedio para cualquier sitaucion de sufrimiento personal'.

Arellano nos habla de los signos sobre una intervención extraordinaria por parte del diablo 'se recogen en el ritual de exorcismos que son unos primeros indicios que tiene que llevar a alertar a las personas de que pudiera ser una intervenciónn extraordinaria por parte del diablo. Esos signos son que se hablen lenguas desconocidas, revelar cosas ocultas o lejanas en el tiempo  y una fuerza física más allá de la capacidad física de esa misma personas unido a una adversión a todo lo que sea sagrado, la referencia a la Virgen, a Dios a los ángeles, a la Eucaristia. Son signos que cuando una persona recibe esa adversion hacia todo lo sagrado junto con otros signos físicos o psíquicos evidentemente ya es un indicio para valorar que evidentemente hay o no una presunta intervención diabólica'.

Restán argumenta que 'durante mucho tiempo, y lo han denunicado los ultimos papas, es que en la predicación normal de la iglesia se ha eludido hablar de estas realidades. Si se integrara de una manera normal dentro del cuadro general de lo que es la concepción de la vida que tiene la iglesia no nos produciria esta extrañza'. Y además, añade, 'que el problema también está en que estamos una sociedad que se ha vuelto muy alejada de Dios'.

Alejandro Arellano cuenta que 'la que la Iglesia pretende dejar claro es situar que en el centro de toda práctica exorcista lo que se encuentra es la victoria de Cristo sobre el demonio, ese es el mensaje positivo,  no hay que tener miedo al demonio, ni a las intervenciones digamos extraordinarias'. Y también 'la conviccion de Fe de la Iglesia en la existencia del diablo que es un ser personal que es un enemigo de Dios y de los hombres y que pretende apartar a los hombres de esa comunión con Dios'.

'Se ha de poner de relieve cuando se habla del exorcismo, es el misterio de Cristo y el hombre caido y redimido, y por otra parte la misión de la Iglesia que es continuar y actualizar su victortia sobre el mal y sobre el demonio, hay que hgacerlo desde un punto de vista muy positivo, olvidando otros aspectos que forman parte de esta realidad de los exorcismo que es un sacramental instituido por la Iglesia y que tiene la misión de llevar a los hombres esa paz y de invitarles a que recorran un camino de conversión que es la clave, el exorcismo no surge de una forma esporádica sino que nace cuando la persona es invitada a cercer en la Fe, a realizar un itinerario en la Fe, un itinerario de conversión, a frecuentar los aacramentos especialmente la penitencia, la eucaristia, la oración', conluye Arellano.