Sin autoridad moral y sin presupuestos
Ya puedes escuchar la Línea Editorial de esta tarde del 6 de mayo

Madrid - Publicado el
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La hemeroteca se ha convertido en una pesadilla para el Gobierno. Pedro Sánchez confía en que, con la velocidad de los acontecimientos, los cambios de rumbo y las incoherencias palmarias vayan cayendo en el olvido, pero hay cuestiones que ni aun así pueden eludir el escándalo institucional y político. Es el caso de los Presupuestos Generales del Estado. Sánchez abanderó en la oposición eslóganes para proclamar que un gobierno democrático que se atenga a lo que la Constitución marca no puede gobernar sin Presupuestos, y que si no los tiene debe convocar elecciones. Pero el presidente es contumaz en aquello de “consejos vendo que para mí no tengo” y ha reclamado a los demás lo que él luego incumple sistemáticamente. El Gobierno lleva meses de prórrogas injustificadas y excusas. Se había dado de plazo hasta mayo. Mayo ha llegado y nada parece que vaya a cambiar.
El momento político no puede ser más convulso e incierto. La mayoría parlamentaria de Sánchez está hecha trizas. La izquierda extrema no está por la labor de apoyar al que llama “gobierno de la guerra”, y los independentistas parece que no negociarán nada que no pase por la amnistía de Puigdemont. En medio de un constante deterioro de los servicios públicos y de los mecanismos básicos del Estado de Derecho, todo parece indicar que el Gobierno pondrá tierra quemada de por medio y se inventará alguna disculpa para vender ante la opinión pública que puede seguir gobernando sin presupuestos. Una situación insostenible cuyas consecuencias terminamos pagando todos los españoles.