Ester Martín, directora de la Oficina de Transparencia de la CEE: "La Iglesia recibe una cuarta parte por vía de la asignación tributaria de lo que realmente invierte en la sociedad"

La directora de la Oficina de Transparencia de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Ester Martín, ha presentado en el programa ‘El Cascabel’ de TRECE la memoria anual de actividades de la Iglesia. En una entrevista con José Luis Pérez, Martín ha explicado que este documento detalla el destino de los fondos que la institución recibe tanto de los contribuyentes que marcan la X en la declaración de la renta como de las aportaciones directas de los fieles, y supone "una oportunidad de llegar a tanta gente" que no conoce la labor real de la institución.

Casi 4 millones de personas atendidas

El pilar fundamental de la actividad de la Iglesia es su labor asistencial, que alcanza a casi 4 millones de personas en España. Esta ayuda busca dar respuesta a "problemáticas reales" de la sociedad, como el desempleo, la desigualdad económica, los problemas familiares, el acompañamiento a jóvenes y la soledad. Martín ha destacado la importancia del gesto de marcar la X en la declaración, una acción que "no cuesta nada al que lo hace y da tanto al que lo recibe".

Esta labor es cada vez más crucial. Como reflejan informes como el de FUESA, un porcentaje creciente de la población se encuentra en riesgo de exclusión social y en situaciones de vulnerabilidad. Ante esta realidad, la Iglesia, "muy pegada a las necesidades reales", atiende a casi 2 millones de personas a través de Cáritas, congregaciones y otras entidades diocesanas, proveyendo "ayuda material, acompañamiento y auxilio en las necesidades más básicas".

El ‘milagro’ de la multiplicación

Uno de los datos más llamativos de la memoria es la gestión de los recursos. Según ha explicado la directora de Transparencia, la Iglesia invierte en la sociedad cuatro veces más de lo que recibe a través de la asignación tributaria. "La Iglesia no espera a tener para dar", ha afirmado Martín para describir un fenómeno que ha calificado como una multiplicación de los recursos "para bien de todos".

Además de su impacto espiritual, la actividad de la Iglesia tiene un importante impacto en el desarrollo social y económico del país. Un ejemplo es el área educativa, donde los colegios católicos suponen un ahorro para el Estado de más de 5.000 millones de euros, un esfuerzo sostenido principalmente por los padres que eligen estos centros para sus hijos, según ha detallado Martín.

Un ejercicio de transparencia radical

La presentación de esta memoria anual constituye, en palabras de Ester Martín, "el mayor ejercicio de transparencia que hacemos actualmente en la iglesia". Ha subrayado que en el informe se da cuenta "hasta el último euro que se recibe", no solo de la asignación tributaria, sino también de colectas, donativos y otras aportaciones de los fieles.

Martín ha reconocido que es "casi tarea imposible" plasmar en unas páginas toda la labor que realizan miles de entidades y personas. Sin embargo, el documento busca reflejar una parte significativa para que la gente conozca la realidad de la Iglesia, con una "voluntad clara y radical que tienen todas las diócesis y congregaciones de contar lo que se es y lo que se tiene". La memoria consolida cifras a nivel nacional de organizaciones como Cáritas, Manos Unidas, COMFER y Escuelas Católicas.

Finalmente, la directora de la Oficina de Transparencia ha insistido en que detrás de las cifras hay personas. "Sin tantas personas que sostienen esta labor, esta memoria no existiría", ha concluido, refiriéndose a los sacerdotes, voluntarios, laicos, religiosos, profesores y cualquier persona que se acerca a una parroquia o centro. Son ellos quienes, en última instancia, dan sentido al informe.