Seguro que cuando escuchas el sonido de los pájaros, tu mente se va a un parque cualquiera, de una ciudad, de un pueblo. Sobre todo por la mañana recién levantado. Siempre hemos relacionado el canto de los pájaros con entornos relajados, tranquilos, donde disfrutar de un rato de tranquilidad. Pues al parecer, los gorriones, esas aves que nos son tan familiares, están descendiendo en nuestro país. Sobre todo en zonas urbanas, más que en los entornos rurales.

Para conocer qué está pasando hemos contado esta noche con la ayuda de Beatriz Sánchez, del programa de Biodiversidad Urbana de la Sociedad Española de Ornitología. Esta es la ONG de conservación de la naturaleza más antigua de España.

El entorno del gorrión

Para conocer al gorrión, lo primero de todo es saber cómo es este pájaro. En qué entorno vive, qué necesidades tiene, qué come… Para que todos los ponedores acaben de conocerlo, Beatriz nos ha descrito como es: "El gorrión común es, sin duda, el ave más cercano al ser humano. Si alguien piensa en un pájaro que haya visto muchas veces a nuestro alrededor, seguro que piensa en el gorrión. Es un ave paseriforme, de un tamaño pequeño, con colores pardos. Al fin y al cabo, es un ave muy sencilla".

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Además, añade que es un gran amigo del ser humano. Nos hemos llevado bien durante miles de años, y resulta que desde hace unos cuantos está desapareciendo de nuestros parques y barrios. Sin embargo, ahora está desapareciendo: "Desde que tenemos datos, la población del gorrión ha descendido casi un 20%. En ciudades como Londres, Praga o Dublín, es mucho peor".

No solo importa el clima

Todos los seres vivos tienen la necesidad de alimentarse. Sin una buena alimentación, cualquier ser vivo vería su vida alterada. A los que nos toca currar por las noches lo sabemos bien. Es más complicado seguir una buena dieta sin un horario "normal" de oficina. Pues a los gorriones y a otras aves no les pasa exactamente eso, sino que su alimento está desapareciendo.

Los insectos son su principal nutriente, y claro, sin ellos, emigran a otro lugar en busca de ellos: "Hay muchas que son insectivoras, es el caso de la golondrina, que nos lelva acompañando en los entornos urbanos durante mucho tiempo, y muchas otras. Y claro, estas especies se alimentan de forma exclusiva de insectos, y para ellas su fuente de alimento es muy importante. Por lo tanto, precisamente muchas de ellas están encontrando un refugio alternativo en otras ciudades".

¿Cómo podemos ayudar nosotros?

El ser humano, en su afán por urbanizar cada lugar al que va, muchas veces no somos conscientes de que estamos destrozando el hábitat de muchas especies. Y por ello, tenemos que responsabilizarnos.

Esto es lo que podemos hacer según Beatriz: "Hay una corriente, una tendencia, hacia la renaturalización de las ciudades, impulsada un poco por la necesidad de devolver esa naturaleza que tanto necesitamos en los entornos donde vive la mayoría de la gente. De hecho, hay una estrategia nacional de infraestructura que contempla también la estructura verde urbana, y nosotros debemos ser capaces de cuidar las ciudades".