Se llamaba Sara, tenía 26 años y había nacido en León. Apenas llevaba viviendo tres meses con su pareja en el municipio tinerfeño de Granadilla de Abona. Es la última víctima de la violencia contra la mujer en España y supone que en lo que llevamos de año 52 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o ex parejas.

No había denuncias previas y la joven pidió ayuda. Primero llamó al 016. Alertados por los ruidos, los vecinos también avisaron a los servicios de emergencia, se activó el dispositivo pero no llegaron a tiempo. Lo ha contado la directora del instituto canario de igualdad, Kika Fumero: “Ella llamó de madrugada al 016 pidiendo ayuda y luego le hicieron parte del vecindario. Llamó al 112, se envió una ambulancia y la Guardia Civil se persona también inmediatamente, pero bueno llegaron demasiado tarde”.

El agresor, de origen colombiano, permanece detenido. Según las primeras informaciones, acuchilló a Sara. El asesinato de esta joven de 26 años llega en el día para la eliminación de la violencia contra la mujer.

Vamos a estar en Granadilla y nos vamos a situar también en Cangas del Morrazo. Los vecinos están revolucionados: “Se han visto antes aquí en la ría si lanchas pequeñas de pescadores pero ahora usan lanchas muy potentes”.

En este punto de Pontevedra, efectivos de seguridad tratan de reflotar un narcosubmarino en cuyo interior, según te está contando COPE hay un alijo de más de 3.000 kilos de cocaína.

Dos de sus tripulantes de nacionalidad ecutoriana están detenidos y un tercero consiguió huir a nado. Es la primera vez que se intercepta en Europa una embarcación similar empleada por los narcos desde 2006. Se barajan varias hipótesis. Una es que hubieran recogido la droga en alta mar de una embarcación más grande. La otra es que haya cruzado el atlántico desde Colombia u otro país sudamericano. Esto, como ha explicado a Mediodía COPE el capitán de navío Alejandro Cuerda, jefe de la sección de submarinos del estado mayor de la armada: “Los que están a bordo y manejan pues no sé yo quizás los asociar quizás a exmilitares. Tienen un conocimiento profundo de lo que es todos los artefactos y artilugios necesarios para navegar a bordo del submarino”, comentaba. Ahora se trata de localizar a los destinatarios de la droga.