Nacho Abad, periodista y criminólogo: “En el baño los dos tienen poca intimidad. Ábalos ha pedido que le ingresen en el peculio dinero para poder comprar una tele”
El experto en sucesos explicaba en 'La Tarde' cómo están viviendo estos primeros días Ábalos y Koldo en Soto del Real y habla de los entresijos de la prisión

Koldo junto a Ábalos
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Hace solo unos días Ábalos y Koldo García entraban en prisión provisional, y, desde entonces, la bola solo se ha hecho más grande. Si antes de ingresar en Soto del Real ambos concedían entrevistas a diferentes medios, ahora no han dejado de saltar las exclusivas que implican a otros miembros del Gobierno.
Se dice mucho eso de que ambos, poco a poco, irán “tirando de la manta” y contando aquello que, parece ser, podrían ocultar. Sea como sea, lo que ahora mismo les falta es, precisamente, mantas, porque según denuncian, hace bastante frío en la prisión.
De hecho, el propio Ábalos ha pedido a sus familiares que le lleven más ropa de abrigo y, como él recordaba en su cuenta de X, antiguo Twitter, hace un frío tremendo. Cómo es su vida en prisión es lo que analizamos en 'La Tarde' con Nacho Abad, periodista y criminólogo, que explica cómo es la vida en prisión.
Ojo, porque no es tal y como la imaginamos, ya que ambos presos se encuentran en un módulo “de respeto” y sin presos conflictivos.
Piden dinero para el economato
A lo largo de estos días hemos hablado de cómo es realmente la prisión de Soto del Real, cómo son sus instalaciones y qué actividades tienen los presos. Por eso, sabíamos que cada preso cuenta con 100 euros semanales para comprar en el economato y que pueden pedir en el peculio dinero extra para comprar, por ejemplo, una tele.
Parece ser el caso de Ábalos, como decía Nacho Abad. “Ábalos ha pedido que le ingresen en el peculio, que es la como la cuenta bancaria de la prisión, que tiene un tope, que le ingresen dinero para poder comprar una tele en el economato de la prisión” decía.
Como decía, esa televisión la pueden utilizar como quieran, siempre y cuando no tenga acceso a internet. Porque no, en prisión no está permitido tener acceso a ninguna red. Por eso mismo nos preguntamos, ¿quién es el que tuitea bajo su cuenta?

Ábalos a su llegada al Supremo antes de ser enviado a prisión
Pues bien, dice Nacho Abad que, aunque no estén permitidos los teléfonos móviles, sí que suelen estar en prisión. “Tienen posibilidades de dar 10 números de teléfono para hablar por teléfono desde prisión, que también está tasado en unos determinados minutos. Si de repente llama uno de los teléfonos y al otro lado está su abogado y el abogado pone a un periodista y le hace una entrevista, se entenderá que ese teléfono ha sido mal usado y por tanto será sancionado en su día” explicaba.
Como medio de comunicación, pueden hablar a través de cartas. “Ellos pueden recibir todo tipo de cartas y sin límite, salvo que un juez determine que esas comunicaciones tienen que ser intervenidas. Y por tanto libertad para recibir cartas y enviar cartas todas las que quieran”.
Celda compartida
Todo lo que sabemos hasta ahora de la convivencia de Ábalos y Koldo es que comparten celda y que, en algún que otro momento, ha habido desavenencias por los ronquidos del otro. Pero, ¿cómo es el módulo en el que están? ¿Cómo es su convivencia?
Como explicaba Nacho Abad, es un módulo de presos poco conflictivos, por lo que la relación es normal con otros internos, aunque no tienen mucho qué hacer. “Se levantan a las 7:30 de la mañana. A esa hora hay un recuento. Tienen que estar ya las celdas limpias. Ellos a las 7:30, ya tienen que tener todo recogido y limpito. Bajan a hacer deporte. Luego tienen que hacer cola para desayunar, hacen fila para comer” contaba Nacho Abad.

Así es el estricto protocolo que siguen Ábalos y Koldo en su primera noche en prisión
“Normalmente, no es que sea muy sano desde un punto de vista nutricional, pero tienen un café, que esto está bien. Luego tienen como alternativas una pieza de bollería, y luego tienen otra alternativa que podría ser la mantequilla y la mermelada” concretaba.
Igualmente, dice que en la propia celda tienen muy poco espacio y poca intimidad. “Tienen un baño ahí compartido los dos que tiene muy poquita intimidad. Esta es, yo creo, la parte más complicada: la de compartir el aseo, el cuarto de baño. Está dentro de la celda” contaba.



