Según un estudio de Cáritas, uno de cada tres adolescentes pasa 6 horas al día delante de una pantalla y el 20% está en riesgo de uso adictivo. Algo que se intensifica con la llegada de las vacaciones. Pero, ¿dónde está el germen de esto? ¿Les damos una pantalla demasiado pronto a nuestros hijos? ¿Estamos generando los adultos este problema? Los expertos señalan que más del 75% de los menores de 2 años y el 64% de los pequeños de entre 2 y 5 años sobrepasaban los límites de exposición a las pantallas recomendados por las autoridades sanitarias.

El agotamiento o la falta de tiempo para estar con ellos son las principales razones que las familias alegan para sentar a sus hijos delante de una pantalla. Pero, ¿somos conscientes de este riesgo? ¿Nos sentamos con ellos y controlamos el tiempo y el contenido que consumen?

Seguro que lo has escuchado alguna vez, los directivos de las grandes tecnológicas: como Google o Microsoft no quieren que sus hijos se críen rodeados de tecnología. Muchos de ellos matriculan a sus hijos en colegios de Silicon Valley y allí los centros educativos apuestan por los libros y cuadernos de toda la vida y las operaciones matemáticas se hacen a lápiz.

¿Cómo conseguir que las pantallas no sean compañeros de viaje de los más pequeños de la casa durante estas vacaciones? Descubre todas las respuestas escuchando ya esta sección de 'La noche de COPE'.