Cada vez que comenzamos un nuevo año, tendemos a marcarnos unos objetivos, unas promesas que nos hacemos a nosotros mismos, casi una tradición. Una manera de llenarnos de optimismo y buenas intenciones, nos proponemos diferentes metas como atraer vibraciones positivas o ser mejores personas e incluso hay quienes se meten con los vicios como dejar de fumar pero, ¿qué suele pasar con esas promesas?, ¿las cumplimos al final?.

Hemos querido acercarte esta realidad cuando vamos contando los días para celebrar el nuevo año 2020.

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El asunto es más complejo de lo que parece, es verdad que cada año muchos hacen estas promesas que intentan cumplir entre enero y diciembre. Se marcan objetivos concretos como invertir en una nueva casa, comprarse un coche o viajar o simplemente perder peso o ponerse en forma. Sergio es monitor y profesor de fitnes en el gimnasio Ftitnes Place, asegura que "esas personas no suelen aguantar mucho. No les gusta esforzarse...ellos viene y dicen, 'quiero perder peso, quiero ser como tú, pero fácil', es muy fácil detectarlos porque dan unas pautas....”

Otros de los objetivos que nos marcamos es el de aprender un nuevo idioma, para así aumentar nuestra capacidad de comunicación. Nos hemos acercado a la Academia Talking 2U de Madrid, Raquel Valero es la Directora y nos ha afirmando que “ Si hablamos de adultos, todos se apuntan en octubre con muchas ganas pero a partir de octubre se quedan la mitad, y luego cuando comienza el buen tiempo ya desaparece todo el mundo...los que se apuntan en plan comienza un nuevo año y quiero aprender inglés, éstos no duran nada”.

La falta de motivación, como reconoce la Psicóloga General Sanitaria , Raquel Héscar, es uno de los principales inconvenientes que tenemos a la hora de culminar con los objetivos marcados. “Lo que ha hay que tener claro es qué te lleva a una motivación en concreto, qué te lleva a decidir proponerte algo. Desde luego para conseguir un objetivo no a de ser una moda pasajera o un capricho, sino que tiene que haber una motivación profunda”.

La idea es resistirse a todas las tentaciones durante los 365 días. Varios estudios estiman que el 25% de las personas abandonan sus propósitos de Año nuevo al cabo de una semana hay que reconocer que un 60% resiste un poco más, ya que éstos abandonan el barco al cabo de seis meses y menos del 10% logra cumplir todo lo que tenía presupuestado al terminar el año. Perder peso, ahorrar, dejar de fumar o aprender algo nuevo son algunos de los propósitos que más nos cuestan cumplir.