¿El núcleo de la Tierra se ha frenado? El lunes, la universidad de Pekín publicó un estudio científico tras analizar más de doscientos terremotos donde señalaba que el núcleo de nuestro planeta había perdido velocidad y que tendría consecuencias para nosotros, pero es una hipótesis, no una teoría probada.

Nadie, ni Julio Verne, ha estado en el centro de la Tierra. Los soviéticos alcanzaron los doce kilómetros de profundidad, por eso no es un cliché decir que conocemos más el espacio exterior que nuestro propio planeta.

¿El núcleo de la Tierra se ha frenado?

El divulgador científico, Jorge Alcalde, ha explicado en ‘La Linterna’ de COPE qué se conoce del núcleo del planeta: “Es una teoría que hay que demostrar, aunque es una teoría seria, realizada por geólogos serios y publicada en una revista serie. El Mundo no se ha parado, pero el estudio de ondas sísmicas ha demostrado algunas irregularidades que se pueden explicar con el cambio de velocidad del núcleo de la Tierra. La estructura interna de la Tierra es como una canica gigante de 3.000 kilómetros de diámetro que flota en un núcleo más líquido con temperatura similar al sol y que gira a una velocidad diferente al resto del planeta”. Jorge explica que sería parecido a meter una pelota de pin pion en un vaso de leche que “al girar el vaso de leche, la pelota y el vaso giran a diferente velocidad”. Los científicos chinos apuntan que, con cierta periodicidad, el núcleo de la Tierra podría ralentizarse e, incluso, variar el sentido de su rotación.

Los terremotos sirven para investigar el interior del planeta, pero ¿cualquier terremoto vale? Jorge puntualiza que “tienen que ser terremotos potentes u ondas que sean capaces de atravesar una porción importante de la Tierra y, además, que puedan ser capturados por los aparatos de resolución sísmica. Se han estudiado varios terremotos y esas ondas que atraviesan la Tierra vuelven hacia el otro lado del planeta con información muy interesante”. Las ondas de los terremotos, tras haber atravesado el núcleo, se modifican y esta modificación solo podría explicarse, según los científicos chinos, mediante los cambios de velocidad del núcleo de la Tierra.

Jorge Alcalde aclara si la disminución de la velocidad del núcleo de la Tierra nos puede afectar de alguna manera: “No. Estos cambios en el campo magnético son a muy largo plazo. El ser humano lleva un millón de años encima de la Tierra y eso es un milisegundo en comparación de los miles de millones de años que la Tierra lleva girando. Los procesos son muy lentos y a nosotros no nos va a afectar. Ese cambio es imperceptible para nosotros”. El divulgador científico explica que la posibilidad de que nos afecte de alguna manera es más “ciencia ficción que ciencia real”.

Cómo ver el cometa que lleva sin visitarnos 47 mil años

Cuarenta y dos millones de kilómetros es la distancia más próxima a la que va a pasar un cometa, un cuerpo espacial que lleva sin visitarnos cuarenta y siete mil años. Fue bautizado el pasado marzo como C/2022 E3 (ZTF) y esta semana será posible verlo: “Es un cometa que solo pudieron ver los neandertales. Este cometa viene del espacio exterior y está a una distancia cien veces mayor que la distancia a La Luna. Tiene la peculiaridad de que, al producirse su llegada en un momento en el que el cielo está despejado en el hemisferio norte porque no hay luna llena, podrá verse con prismáticos, sin telescopio”, explica Jorge.

Las fotos que ha distribuido la NASA muestran una luz verde. ¿Cómo es el cometa?: “La veremos como una estrella difuminada, un poco más grande. Hay que mirar hacia el norte, buscando un lugar de la ciudad con pocas luces y con unos prismáticos podremos encontrar una estrella más rara de lo normal”.