Este próximo domingo se celebra en Francia la primera vuelta de unas elecciones presidenciales que van a ser fundamentales no solo para el futuro del país, sino para toda la Unión Europea. Y es que hablamos de una nación de más de 67 millones de personas, que es la séptima economía del mundo y uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

Durante esta primera vuelta, hay 12 candidatos oficiales, pero las encuestas indican que hay dos grandes favoritos los mismos que se enfrentaron hace cinco años. El primero, el actual presidente del país, Emmanuel Macron.

La principal contrincante de Macron va a ser Marine Le Pen, la eterna líder de extrema derecha que se presenta por tercera vez y que este año está avanzando rápidamente en las encuestas.

Habrá que esperar hasta el 24 de abril, en la segunda vuelta, para saber finalmente quién será el nuevo presidente de Francia. Un cargo que tendrá que enfrentarse a situaciones bastante complicadas.

Entre ellas, tendrá que determinar cuál va a ser el papel del país en la guerra de Ucrania o cómo va a afrontar una recuperación económica relacionada con una pandemia que está tensando las cadenas de suministro. Pero, ¿cómo es el sistema electoral?¿Qué se espera que suceda? Hoy hablamos de las elecciones en Francia, nuestro vecino del norte.

Como te digo este fin de semana los franceses empiezan a elegir a elegir al nuevo líder del Elíseo. Algunos de ellos ya tienen más o menos claro lo que puede ocurrir el domingo. Es el caso de Sandra, tiene 31 años y lleva ocho años viviendo en París.

Se calcula que la abstención en estos comicios podría superar el récord de las elecciones de 2002. El último sondeo establece que solo el 67% de los franceses está seguro de ir a votar este domingo. La votación en blanco sigue sin contabilizar en el cómputo global mientras que los votos de los indecisos podría ser clave.

Pero los comicios en Francia son algo diferentes a lo que estamos acostumbrados en nuestro país. Su sistema electoral es para un órgano unipersonal, es decir, los ciudadanos votan directamente a la persona que quieren que ocupe el cargo de presidente. Jordi Rodríguez es profesor de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra.

Las normas electorales francesas son estrictas, con rigurosos límites a la financiación de las campañas y al tiempo de emisión. Se celebran en dos vueltas siempre y cuando, durante la primera, uno de los candidatos no supere el 50% de todos los votos.

En esta segunda vuelta, solo concurrirán los dos candidatos más votados en la primera ronda. Esto provoca que haya una gran transferencia de votos entre uno y otro. Eso sí, los candidatos necesitan cumplir una serie de requisitos. Olga Gilart es doctora en derecho en la universidad a distancia de Madrid.

Las elecciones presidenciales francesas se realizan mediante sufragio universal, por lo que cualquier ciudadano mayor de 18 años y con nacionalidad francesa tiene derecho a voto. Por otro lado, es posible votar en el nombre de otra persona, siempre que el implicado haya autorizado a otro ciudadano que esté inscrito en su mismo padrón electoral.

El candidato elegido permanecerá en el cargo para un mandato de cinco años. Además, solo podrá renovarse una vez de manera consecutiva, algo que desde el año 2000, no ha ocurrido en Francia.

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La guerra de Ucrania esta marcando una campaña en la que el coronavirus ha ido dejando paso a la economía como principal preocupación para la mayoría de los franceses. Las restricciones se han ido levantando casi por completo desde marzo y la situación en el país está volviendo de nuevo a la normalidad.

Como te digo, son 12 los candidatos que se juegan ocupar uno de los dos puestos de la segunda vuelta pero entre ellos hay dos claros favoritos.

El resto de candidatos, que tienen entre el diez y el 15 por ciento de los votos, se disputan el tercer puesto con la esperanza de lograr un aumento de última hora.

Aquí está Mélenchon, el líder del partido de extrema izquierda Francia, Pécresse, representante del principal partido conservador... y casi de las últimas, la socialista y alcaldesa de París Anne Hidalgo.

Hoy hemos hablado de las elecciones en Francia. Más de 65 millones de ciudadanos están llamados a las urnas para elegir a su nuevo presidente. Una decisión que van a ser fundamentales para el futuro del país, sino para toda la Unión Europea.