Un agente de la Guardia Civil responde a si los altercados se pueden extender en Murcia y por qué empezó en Torre Pacheco
El secretario provincial en Murcia de la AUGC, Juan García Montalbán, analiza con Expósito qué ha pasado en materia de seguridad en la localidad murciana este fin de semana

Madrid - Publicado el - Actualizado
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La localidad murciana de Torre Pacheco, epicentro de una ola de violencia callejera en los últimos días, sigue en vilo ante la posibilidad de que los altercados se extiendan a otras zonas de la provincia. En una entrevista en La Linterna de COPE, el secretario provincial de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) en Murcia, Juan García Montalbán, analizó la situación, advirtiendo de una "calma tensa" y criticando la falta de refuerzos policiales que, según él, se venían demandando "desde hace años".
El origen: Torre Pacheco, un polvorín
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Máxima tensión en Torre Pacheco
Torre Pacheco, municipio agrícola con un 30% de población extranjera, principalmente magrebí, ha sido escenario de choques entre grupos de vecinos armados con bastones y migrantes que respondieron "equivocadamente", según Montalbán. Los incidentes, que comenzaron tras una agresión a un anciano, escalaron rápidamente tras concentraciones convocadas por Vox bajo el lema "Defenderse de la inseguridad", según informaron medios locales. El secretario de la AUGC destacó que la localidad es "icónica" por su alta densidad de mano de obra magrebí en el campo, un factor que, unido a la "disminución de efectivos" de la Guardia Civil, ha exacerbado la tensión.
"Llevamos años pidiendo al menos 500 agentes más para seguridad ciudadana en la región. Las plantillas se reducían mientras la delincuencia y la población crecían", denunció Montalbán en La Linterna. Criticó además que los refuerzos prometidos por el Ministerio del Interior llegaran "tres días tarde", cuando los altercados ya habían estallado.
Riesgo de contagio en Murcia
Ángel Expósito, director del programa, planteó el temor a un "efecto contagio" en otras zonas de Murcia con similar perfil demográfico, como el Campo de Cartagena. Montalbán reconoció el riesgo pero matizó: "El resto de localidades limítrofes son más pequeñas. Esperamos que no ocurra". No obstante, subraya que la presencia de magrebíes en la agricultura es "muy importante" en toda la provincia, lo que podría avivar conflictos si no se controla la situación.
Los agentes, según describió, actúan como "fuerza de interposición" entre los bandos, un rol "complicado" sin suficiente protección. "Ha habido una escalada: primero patrullas vecinales, luego respuesta de magrebíes. Nuestros compañeros han hecho de barrera para evitar agresiones", explicó. La Ertzaintza detuvo a un tercer implicado clave en Rentería (Guipúzcoa), según avanzó Expósito en el programa, aunque no se confirmó su vinculación directa con los disturbios en Murcia.

Agentes de Policía Local y Guardia Civil durante los altercados en Torre Pacheco
Fallo institucional y reclamos ignorados
Montalbán cargó contra la delegación del Gobierno por no atender las peticiones de refuerzos: "No entendemos por qué se tardó tanto. Los partidos políticos, los mandos y hasta los ciudadanos saben que faltan guardias civiles". Cuestionó si la delegada Mariola Guevara, quien confirmó los incidentes, había actuado con la celeridad necesaria, y recordó que los antidisturbios "deberían haber llegado el sábado, no ayer".
Más sobre Torre Pacheco
La respuesta política ha sido divisiva. Mientras Podemos denuncia una "cacería racista" impulsada por "grupos neonazis", Vox insiste en vincular inmigración e inseguridad. El alcalde de Torre Pacheco, Pedro Ángel Roca (PP), ha pedido calma, pero la AUGC insiste en que la solución pasa por más medios y agentes: "Sin recursos, esto puede repetirse".
Y es que Torre Pacheco, con 35.000 habitantes, es un enclave agrícola donde el 62% del territorio son cultivos y el 83% de los contratos son temporales, según datos de 2024. La dependencia de mano de obra migrante (esencial para cosechas como lechugas o melones) contrasta con la precariedad laboral y la falta de integración, un caldo de cultivo para conflictos. Los altercados de 2025 no son aislados: en verano de 2024 ya hubo enfrentamientos, aunque de menor escala.