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Señores, señoras, me alegro, ¡buenos días!

¡Qué nervios, Señor! ¡Qué nervios! Esto no es forma de vivir. Esto no es forma de vivir. Así no se puede... A las 8 de la mañana y hasta las 10 no sabemos cómo va a reconocer Pedro Sánchez a Juan Guaidó como presidente de Venezuela. Dios mío, con la noche que he pasado. Bueno, con la noche que hemos pasado todos porque, claro, ha vencido el plazo y ahora hay que dejar de reconocer a Maduro, aunque le llamemos tirano y aunque le pidamos que organice elecciones, y reconocer al que ha elegido la Asamblea Legislativa. La de verdad. La votada por el pueblo bla bla bla. Bueno, pues eso.

En fin... Lunes 4 de febrero del 2019. Hoy van a subir las temperaturas un poquito, así que anden ustedes con tranquilidad. No crean que va a ser salir a la calle y... En un país en el que... Vamos a diferenciar: no hace frío pero algunos pasan frío. Es decir, frío en España no hace. Lo lamento, no hace. Pero es verdad que algunos pasan frío. Y como esto es sensación térmica más que otra cosa, más que la verdad de lo que diga el termómetro, pues reconozcámosle a alguno el derecho tener frío. Hoy suben las temperaturas, con lo cual, quedarán vientos en alguna parte de Cataluña, Mallorca y Menorca básicamente. Ibiza seguramente se salva.

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Y como les decía, pasaron los ocho días. Es curiosa esta forma de reconocer a un tirano, al que le llamas tirano, a un individuo como Maduro, y decirle que organice elecciones. Él. Fíjense, él, que no es precisamente el más indicado para organizar elecciones. Bueno, pues en eso estamos. Que han pasado los 8 días y no ha organizado elecciones y, por lo tanto, ahora Pedro Sánchez es sujeto de su propia advertencia, que no amenaza. Advertencia.

Hemos sabido que a las 10 se ha convocado a los medios porque en La Moncloa Pedro Sánchez va a intervenir para hablar de este asunto, lo cual dirá... Bueno, no sé, pues me imagino después de 8 días que este señor no ha hecho nada o no ha hecho lo que se le pedía, a pesar de que le llamáramos tirano, no se ha hecho lo que pedía y, entonces, reconocemos a Juan Guaidó.

Bueno, ¿eso qué quiere decir? Pues, hombre, que las cuentas que tenga aquí en España la embajada venezolana, por ejemplo, esas quedan intervenidas para ponerlas a disposición de la Administración de Guaidó. Es un hecho que no tiene muchos precedentes. Es decir, cambiar el reconocimiento de un gobierno a otro mientras sigue en la práctica de ese gobierno aquella persona a la que le despojas del reconocimiento. Eso no hay demasiados precedentes. Cuando se produce algún tipo de asonada militar que destrona a un individuo y los países deciden si a ese destronado lo sigan reconociendo o no o reconocen al otro... Bueno, en fin...

Pero que haya una legitimidad nacida de la elección en una asamblea, la legítima, que nombra a un presidente encargado, que es Guaidó, mientras en los recursos del poder sigue estando instalado el otro, y que la mayoría de países cambien el reconocimiento a por el nuevo, es una situación evidentemente no habitual. Así que esto...

¿Qué va a hacer la embajada española en Venezuela, por ejemplo? ¿Qué van a hacer las embajadas alemana, francesa, etcétera, etcétera de la Unión cuando se reconozca a Guaidó? Oiga, ¿va a reaccionar Maduro con esas amenazas que dijo ayer con Évole en televisión que tiene el ejército de no sé cuántos miles de hombres más las milicias del pueblo que están armadas a las órdenes de los sargentos del pueblo, que eso ya es una cosa temblorosa? Cuando ya salen este tipo de tíos a llamar sargentos del pueblo a algunos matones que hay por allí, témanse lo peor.

¿Quiere decir que ahora Maduro igual se revuelve y encarga la detención de Guaidó, por ejemplo? El otro día ya le mandó un avisito yendo a ver a su suegra y a su niña pequeña a su casa y... Como queriendo decir: “Oye, que en cualquier momento te detengo”. Hombre, si eso se produce, si se produce la detención de Guaidó, no descarten ustedes algún tipo de intervención. O no. Como digo, igual cae porque le abandonan militares y aún así tampoco lo va a poner fácil. Si cae, desde luego, la caída de Maduro no va a ser indiferente en otros países. No lo va a ser en Nicaragua, por ejemplo. No lo va a ser en Honduras. Puede incluso no serlo en Cuba. Es decir, no sabemos a qué escenario nos abocamos.

Ayer estuvo Maduro en La Sexta en una entrevista en el programa 'Salvados' que, como siempre, despierta unas polémicas que a mí me parecen un poco... En fin. Vamos a ver, yo defiendo que Maduro... En una entrevista que ya me gustaría hacerla a mí porque a mí no se me va a poner, pero ya me gustaría hacerla. Que a lo mejor no haría la misma que hizo él, pues no lo sé porque no vi la de Évole. Pero me parece... Hombre, periodísticamente me parece interesante tener a Maduro, ¿no? Que dice que lo que... Por lo que sé, que vino a decir que es que en Venezuela no hay crisis humanitaria o humana, que lo que hay es una crisis política. Este llama crisis política a 40 muertos desde el 23 de enero, a tres millones y medio de exiliados, etcétera, etcétera.

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De que una intervención lo que puede aportar o puede traer, desde luego, es un enfrentamiento civil en Venezuela. ¿Quién le apoya a Maduro? Los rusos. ¿Y qué se puede hacer con ese apoyo? Los chinos están ya pensándoselo. Pues, miren, oiga, esto... Donald Trump le puede decir perfectamente a Vladimir Putin: “Oye, va lo de Crimea por lo de Venezuela, eh. Que en Crimea le recuerdo lo que pasó". Es decir, Ucrania quería llegar a acuerdos con la Unión Europea. Finalmente, el presidente prorruso descarta esos acuerdos, los derroca esos acuerdos con la Unión Europea, y algunos grupos separatistas prorrusos independientes en algunas regiones crean algunas repúblicas, etcétera, etcétera. Y Rusia se aprovecha en ese momento y se anexiona a Crimea. Crimea, si se fija bien en el mapa, es como el escroto... Usted ve un toro y ve que el toro tiene abajo... Bueno, pues eso. Es Crimea dentro de Ucrania, que es mayoritaria de población rusa. Fue invadida por Rusia que controla de esa manera el Estrecho de Kerch, que es el que separa el mar Negro... Y por ahí, para ir de un lado a otro de Ucrania, tienen que pasar barcos ucranianos que Rusia no deja que pasen. Es decir, bueno, que lo de Crimea lo damos por bueno pero vamos a ver qué pasa entonces en Venezuela. Pues por ahí se pueden mover las cosas.