David Docal, presidente del Centro de Estudios e Iniciativas sobre discriminación y Violencia (CEDIV), analizaba las motivaciones de los manifestantes que provocaron altercados esta semana en protesta por la condena al rapero Pablo Hasél. Lo ha hecho en Fin de Semana junto a Cristina López Schlichting, donde explicaba que lo que más le ha llamado la atención de los ataques a los comercios y los agentes de policía es precisamente la juventud de los participantes. “Chavales de 16 y 17 años que, en lugar de bajarse al parque a divertirse o a jugar al fútbol, van a manifestare, a tirar piedras a la policía y a saquear comercios”, lamentaba este sábado el experto.

Además, el experto en violencia urbana insiste en la incidencia de la pandemia y las restricciones en estas conductas: “Esa marcha antes era en la discoteca, ahora era en su casa”, comentaba a Cristina. “Estamos en un estado de alarma decretado por un Gobierno tanto en la movilidad como en la reunión, no podemos comer más de 6 personas en la calle, pero no hay medidas de restricción para manifestarse”.

Los motivos de los manifestantes

Sobre las reclamaciones de los violentos, Docal se mostraba cada vez más molesto: “¿Para reclamar el qué? ¿La libertad de una persona que ha cometido varios delitos y que se alegra del tiro en la nuca de un “socialista o un ppero?”, criticaba sobre las letras de las canciones de Hasél.

Otro de los aspectos que destaca es la profesionalización entre los violentos: “van de negro, con ropas que se pueden intercambiar entre ellos para no ser reconocibles en las detenciones”. La profesinalización de la violencia, que Internet ha ido repartiendo en manuales para que estos chicos se lo crean. “¿Para qué?”, se pregunta el experto en violencia. “¿Para reventar Calzedonia, reventar la caja fuerte y salir corriendo?” cuestiona indignado David Docal.

“Hay que poner pie en pared”

“Se necesita poner pie en pared, y el límite en la Ley en la que todos nos amparamos”, advierte el presidente del CEDIV en Fin de Semana. “Estamos hablando de delincuentes y fascistas, que con violencia quieren imponer una idea”, reprocha Docal a los manifestantes, menores de edad, que han provocado violentos alborotos tanto en la capital como en la ciudad condal esta semana.

“¿Con qué etiqueta luchan? Con 16 y 17 años no lo entienden, y falta educación. Esos contenedores rotos hay que volver a ponerlos”, concluye.