En El Espejo celebramos el 75 aniversario de las Misioneras de Cristo Jesús. Su andadura comenzó en 1944 con tres mujeres navarras que querían seguir el ejemplo de San Francisco Javier y llevar el mensaje de Cristo a los pueblos más alejados y necesitados y lanzarse a abrir nuevos caminos al Evangelio.

En El Espejo Alfonsine Kitumua, Directora General de la Congregación, ha recordado la historia de esta congregación que surgió en un grupo femenino de Acción Católica.

"Nuestro carisma es anunciar el amor de Dios-Padre allí donde nos envíen", ha contado Alfonsine, que lleva cuatro años en Madrid, pero que tiene nacionalidad venezolana, aunque nació en el Congo. 

Ha contado que en su país natal descubrir a las misioneras fue un impacto y su testimonio y su mensaje encajó "como anillo al dedo" con lo que le pedía su corazón.

A pesar de las crisis, de las polémicas y de la falta de vocaciones en algunos países, Alfonsine Kitumua ha explicado que la tarea misionera sigue teniendo sentido, porque "todavía hay mucha gente en el mundo que no conoce el Evangelio".

"Nosotras somos una congregación exclusivamente misionera y nuestro testimonio es desde esa universalidad de la Iglesia, para anunciar con nuestro actitud el amor de Dios", ha explicado.

Pare entender cuál era el contexto en el que nació esta familia misionera, A. Kituma se ha referido a la conversación que tuvo la fundadora con un misionero japonés, el P. Domenzain quien le dijo insistente a Mª Camino Sanz Orrio:"Si hubiera misioneras que hacen lo que ustedes hacen aquí con Acción Católica, con el estilo libre y flexible que les caracteriza, la Iglesia ganaría mucho".

Poco después nacía esta congregación que actualmente celebra un año jubilar, con motivo de los 75 años de su fundación.