Un gol agónico de Alayeto en el 92 catapulta al Tudelano al coliderato

El estadio Ciudad de Tudela ha vuelto a ser un fortín para el CD Tudelano, que con una mezcla de paciencia, coraje y fútbol ha logrado una victoria clave frente a la SD Gernika. Un golazo de Alayeto en el minuto 92 ha sellado el 1-0 definitivo, un resultado que premia la fe de un equipo que recupera sensaciones y regresa a la cima de la clasificación.

El encuentro ha comenzado con un Tudelano dominador, que ha llevado la iniciativa en el juego y ha generado las ocasiones más claras de la primera mitad. Íker Bachiller ha sido el primero en avisar con un potente disparo en el minuto 12 que el guardameta rival ha desviado a córner. Poco después, Aparicio y el propio Alayeto han estado a punto de marcar en dos acciones que se han marchado por centímetros.

El guion que cambió el partido

Tras el paso por vestuarios, el Gernika ha conseguido equilibrar el choque, conteniendo mejor las acometidas locales y llevando el partido a un terreno más disputado. Sin embargo, la balanza se ha inclinado de nuevo en el minuto 71, cuando una durísima entrada sobre Dufur ha dejado al equipo visitante con diez jugadores por expulsión.

Con superioridad numérica, el equipo dirigido por Héctor Urquía se ha volcado por completo sobre el área rival. El propio Dufur, protagonista en la acción de la roja, ha tenido la oportunidad más clara en un remate a bocajarro tras un saque de esquina que el portero del Gernika ha salvado con una mano milagrosa.

Un cabezazo de oro en el descuento

El asedio blanquillo ha encontrado su recompensa en el tramo final. En el minuto 92, un centro medido de Isaac al segundo palo ha encontrado la cabeza de Alayeto, que llegando desde atrás ha conectado un remate perfecto que se ha colado por la escuadra. El gol ha desatado la locura en la grada, consciente de que significaba la consecución de tres puntos de oro y el regreso al coliderato.

El pitido final ha confirmado un triunfo tan trabajado como merecido para un Tudelano que ha sabido madurar el partido y resolverlo con empuje y calidad. Esta victoria de carácter confirma la solidez del equipo en casa y puede suponer un punto de inflexión en su lucha por el liderato.