Este es el pueblo que renace gracias a un holandés con casas desde 10.000 euros y vida tranquila
Johan Michelsen es un prejubilado holandés que, tras meses de búsqueda, encontró este rincón de la Comunidad Valenciana

Los nuevos propietarios en Tirig
Valencia - Publicado el - Actualizado
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Se trata de un pequeño municipio situado en el Alt Maestrat y ha comenzado a cambiar su historia gracias a una iniciativa tan simple como poderosa: poner en contacto a propietarios de casas vacías con posibles compradores. La chispa la encendió Johan Michelsen, un prejubilado holandés que, tras meses de búsqueda, encontró en este rincón de la Comunidad Valenciana el lugar perfecto para vivir en paz y naturaleza.
"Hemos visto muchos lugares, pero en Tírig encontramos tranquilidad, naturaleza y una casa preciosa. La gente aquí es muy gentil", contaba Michelsen, que se instaló hace 10 meses junto a su pareja tras comprar una vivienda en la localidad.

Imagen de la masía
La historia de Johan no ha quedado ahí. Su interés por colaborar con la comunidad lo llevó directamente al Ayuntamiento, donde el alcalde, Juanjo Carreres, vio en él un aliado perfecto para un viejo sueño: repoblar el municipio. "Nos propuso ayudar a atraer a más gente del centro de Europa. Así empezamos a elaborar una lista de casas vacías y de terrenos", explica el alcalde.
Aunque aclaran que no hacen de inmobiliaria, la estrategia consiste en facilitar el contacto entre propietarios y compradores interesados. Y está funcionando. "Ya hemos conseguido que una pareja de holandeses compre una casa con un terreno de 44.500 metros. Son los primeros pobladores nuevos que llegan gracias a esta iniciativa", señala Carreres, satisfecho con los primeros frutos.
Tírig cuenta actualmente con 450 habitantes y 22 niños en el colegio. "Estamos aguantando, resistiendo", reconoce el alcalde, quien subraya la importancia de atraer nuevas familias para garantizar el futuro del municipio. La llegada de nuevos vecinos, especialmente si tienen niños, sería clave para mantener servicios básicos como el colegio.

Imagen de parte de la masía
Los precios de las viviendas son también un atractivo poderoso: se han vendido casas por tan solo 10.000 euros, aunque la mayoría rondan los 20.000 o 25.000 euros. Algunas están listas para entrar a vivir con pequeñas reformas, otras requieren rehabilitación completa, pero las oportunidades existen.
"Tengo una lista con 14 casas y 5 terrenos con masías en ruinas", explicaba Michelsen, que ha asumido un papel casi de mediador entre sus contactos en el extranjero y los propietarios locales. Y aunque la mayor parte del interés viene de países como Holanda o Bélgica, el alcalde deja claro que "tambien contemplamos que vengan personas de otras zonas de España o de la Comunidad Valenciana".
La idea está despertando interés. Desde que apareció en prensa, el Ayuntamiento ha recibido múltiples consultas sobre precios, disponibilidad y contacto con dueños. Mientras actualizan la web municipal para incluir esta información, animan a los interesados a llamar directamente al Ayuntamiento, donde se les atenderá encantados.
Tírig está lejos del ruido, pero muy cerca del mar: a solo 35 kilómetros de la costa, rodeado de montes y silencio. Un refugio perfecto para quienes buscan otro ritmo de vida, asegura Johan, que ha cambiado definitivamente los Países Bajos por este rincón del Maestrat.