El sector del transporte alerta al Ministerio de Óscar Puente del impacto de eliminar el CAP online

Las principales asociaciones del transporte profesional por carretera en España, junto con organizaciones de cargadores, entidades logísticas, centros de formación especializados, autoescuelas y diversas agrupaciones relacionadas con la movilidad, han expresado su profunda preocupación por las graves consecuencias que tendría excluir la modalidad online —tanto la teleformación como el aula virtual— del CAP de Formación Continua. Se trata de un formato plenamente contrastado, cuya supresión dificultaría aún más el acceso a la profesión de conductor de camión y autobús, dos sectores que ya arrastran una acusada escasez de personal: en España faltan en torno a 30.000 transportistas y 4.700 conductores de autobús. 

Las entidades del sector advierten de que la eliminación del CAP a distancia complicaría especialmente la vida de los conductores en activo, obligados a renovar su acreditación cada cinco años. La flexibilidad de los cursos online es, recuerdan, esencial para compatibilizar la formación con largas jornadas laborales. Además, la teleformación presenta ventajas ambientales significativas: permite reducir hasta un 79% la huella de carbono por alumno frente al modelo presencial, según un estudio de ANCYPEL y del Consejo General de Colegios Oficiales de Químicos de España basado en la metodología de Análisis de Ciclo de Vida (ISO 14040 e ISO 14044).

El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible (MITMS) está ultimando una modificación del RD 284/2021, que regula la formación obligatoria del CAP, el título que certifica que los conductores profesionales han adquirido los conocimientos necesarios para operar con seguridad y responsabilidad. Esta acreditación se obtiene mediante un curso inicial y debe renovarse cada cinco años mediante una formación de actualización. Sin embargo, el borrador de la nueva normativa genera inquietud en el sector por varias razones. En primer lugar, ignora la normativa europea, ya que la Directiva (UE) 2022/2561 permite desde hace años el uso de herramientas digitales en la formación siempre que exista calidad y control del proceso, pero el proyecto español elimina por completo la teleformación e impide incorporar el aula virtual en el CAP de Formación Continua. En segundo lugar, dificulta el acceso a una profesión estratégica, introduciendo una rigidez que desincentiva la incorporación de nuevos profesionales, incluidos los procedentes de terceros países. Además, se alerta de un problema de control y trazabilidad: al retirar los sistemas biométricos de verificación en los cursos presenciales, aumentaría el riesgo de fraude, mientras que los entornos online permiten un seguimiento exhaustivo, en tiempo real y a posteriori. El sector también subraya las ventajas pedagógicas de la formación digital —flexibilidad, conciliación, cursos en lengua materna— y la necesaria coherencia con otras formaciones oficiales, como los permisos de conducir o los cursos de recuperación de puntos, que sí incorporan la modalidad online. A ello se suma el respaldo legal de la LOE/LOMLOE, que promueve la educación a distancia para adultos.

En España, el itinerario formativo para acceder a la profesión de conductor profesional ya es especialmente complejo, pues depende de la regulación europea y de la coordinación entre tres ministerios —Interior, Transportes y Educación y FP— además de las consejerías autonómicas. Por ello, las asociaciones consideran incomprensible que, en pleno siglo XXI, se plantee restringir herramientas que facilitan el acceso y la actualización profesional. Todas las organizaciones firmantes coinciden: «Es incomprensible que se excluya la formación online en pleno siglo XXI. Los conductores necesitan flexibilidad, no más obstáculos».

Este posicionamiento conjunto está respaldado por un amplio bloque sectorial formado por la Asociación del Transporte Internacional por Carretera (ASTIC), la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (FENADISMER), la Asociación Española del Transporte (AET), la Asociación Española de Empresas Cargadoras (TRANSPRIME), UNO Logística, la Asociación Española de Empresarios de Transporte Bajo Temperatura Dirigida (ATFRIE), la Asociación de Cargadores de España (ACE), la Asociación Nacional de Empresarios de Transportes en Autocares (ANETRA), la Unión de Operadores de Transporte Comodal (UOTC), la Asociación Empresarial de Transporte de Mercancías por Carretera (APETAMCOR), Foro de Logística, Fundación Corell, OnTurtle, AT Academia del Transportista, la Asociación Nacional de Centros y Proveedores de E-Learning (ANCYPEL), Ecodriver Mobility University y DAC Docencia, que reclaman mantener un modelo formativo adaptado a la realidad del transporte y a las necesidades de miles de profesion