Valencia Basket aplica el rodillo ante el San Pablo Burgos para seguir en lo más alto de la ACB (100-82)

Venir a Valencia ahora no es sencillo. Te llames Dubai o San Pablo Burgos. Los burgaleses lo sabían, pero aún así no pudieron contener la primera estampida, tres triples y un dos más uno, así de inicio, 12-2 y minuto de Savignani. Eso es como una carta de presentación. Luego toca ya ir a remolque. 

Con 20-10, minuto 5, entró el elemento extraño, Braxton Key. Pronto dejó claro que es completo. Un rebote ofensivo con asistencia, un triple, para el 28-12, minuto 8. Era la máxima. La segunda oleada. Burgos intentaba no bajar brazos, pero se fue 55-35 a vestuarios. 

Llamó la atención que los burgaleses volvieron cabizbajos a la pista y el preparador físico les tuvo que animar. Sea lo que fuere, hubo reacción, parcial de 0-6, 55-43. Minuto de Pedro. Siguió impreciso Valencia Basket y San Pablo Burgos picando piedra, ahora con esperanza. 60-49, minuto 26.

Fueron unos minutos para que Montero frotara la varita mágica, con algunos trucos maravillosos. Pero se había perdido un poco el control y los visitantes remaban. 67-57, después de haberse puesto a 15. 71-57, final del tercero. 

Un mate de Key y una asistencia completaron su presentación. Sabe jugar a esto, sobrio. Costello, con triple y dos más uno, devolvió el colchón. Para que el partido muriera sin sobresaltos y meterle presión a Tenerife, que jugaba más tarde en Vitoria. La próxima, Kaunas, el viernes.