El gobierno valenciano sigue tirando de máxima prudencia y lo supedita todo a que lleguemos al verano con una buena situación epidemiológica.

Por eso, aunque este jueves se revisan las restricciones en vigor por la pandemia, el presidente Ximo Puig ya ha dejado entrever que no habrá muchos cambios en las tres semanas que quedan para que decaiga el Estado de Alarma.

Y para después, también advierte que se quiera evitar la sensación de relajación, y por eso, sin citar ninguna en concreto, Ximo Puig ha recordado hoy que justo una antes del Estado de Alarma, la Comunidad Valenciana ya puso en marcha algunas limitaciones que fueron refrendadas por los tribunales.

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#COVID19. La Sala de lo Contencioso del @TSJCV ratifica las limitaciones a la movilidad nocturna y las reuniones sociales acordadas por la Generalitat en la Comunidad Valenciana antes de la declaración del #estadoalarma

— TSJCV (@TSJCV) October 27, 2020

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En concreto, lo que avaló el Tribunal superior de Justiocia de la Comunidad Valenciana fueron 5 medidas tomadas mediante decreto el 24 de octubre, que eran: toque de queda desde las 12 de la noche y hasta las 6 de la madrugada, limitación a un máximo de limita a 6 personas para las reuniones de carácter familiar o social en espacios tanto públicos como privados, se cerraron jardines y espacios al aire libre desde las 10 de la noche a las 8 de la mañana, y prohibición del consumo de alcohol en la vía pública, para evitar botellones.

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El alto tribunal valenciano interpretó que la Ley de Salud Pública de 1986 ampara esas limitaciones de los derechos fundamentales porque suponen únicamente la restricción o limitación de libertades, pero no la suspensión de los mismos.