María Dueñas triunfa en el Festival de Granada con la Orquesta Nacional

Resulta absolutamente sorprendente la categoría artística que ofreció la granadina María Dueñas en su actuación en el Festival de Granada, junto a la Orquesta Nacional. No es cuestión de paisanaje el calificarla como una de las mejores violinistas del mundo. La pregunta es cuál puede ser su evolución en el futuro, puesto que tiene veintidós años. Eligió para su actuación en el Palacio de Carlos V, la Sinfonía Española de Lalo que le permitió exhibir todas las cualidades que le adornan. En 2025 se cumplen 150 años de su estreno. Sin duda, es una elección adecuada en tanto ya ha trabajado en otras ocasiones esta partitura y, además, sabe interpretar con absoluta naturalidad el carácter de la composición. Su técnica es soberbia y ello le permite mostrar su expresividad, repleta de ímpetu y a la vez elegancia. La pasión ha sido la nota dominante en su genial actuación, junto a un grupo orquestal que supo estar a la altura, bajo la batuta del Andrés Orozco Estrada. 

granada de lara para violín y arpa

Cuando concluyó su versión de la Sinfonía Española, los asistentes, de forma casi espontánea, ofrecieron un sonoro aplauso, entremezclado con rotundos y sinceros bravos, muestra de cómo había conseguido conectar con el público. Entre el entusiasmo que había provocado salía, una y otra vez al escenario para recibir este tributo y llegó el momento de dos regalos. Primero fue el  Canto de Veslemoy de Johan Halvorsen, repleto de un lirismo que mostró de forma magistral la granadina y después un arreglo de Granada de Agustín Lara, para violín y arpa, escrito por ella, como muestra de su faceta de compositora. Resultó bellísimo y desató la apoteosis en el patio de butacas y la galería. Los profesores y el director de la orquesta, no pudieron sustraerse al éxito de María Dueñas y se sumaron de forman entusiasta a estas ovaciones.

un excelente versión de la sinfonía fantástica

Tras el descanso, la Orquesta Nacional de España, vinculada desde la primera edición de una manera muy especial al Festival de Granada, ofreció la Sinfonía Fantástica de Berlioz. La formación pública mostró la mejor de ella misma, con la batuta entusiasta y de indudable categoría del colombiano Andrés Orozco Estrada, actual titular de la Orquesta Sinfónica de la RAI. La interpretación estuvo repleta de matices y cabe ser calificada como memorable. Se cuidó el detalle y algunos instrumentos sonaron desde el fondo del patio de butacas, buscando el efectismo deseado por el autor. Podemos asegurar que la ONE atraviesa por un extraordinario momento artístico y también que el concierto que ha ofrecido cabe calificarse entre los mejores que ha interpretado en Granada. Por tanto, el espectáculo de este domingo, puede garantizarse que ha estado al nivel esperado de un Festival de la categoría del granadino.