"Parece que escucho música clásica". A la espera de revestir la túnica nazarena, la reacción de quien acaba de quitar el plástico recién publicado el doble CD no deja lugar a dudas. Las obras del recordado compositor Germán Álvarez Beigbeder (Jerez de la Frontera, 1882-1968) tienen tal talla que, interpretadas con toda la riqueza instrumental de la orquesta y la calidad de sus músicos dirigidos por su propio hijo José María, se convierten en una joya que llega convertida en "proyecto profundo y apasionante" como reconoce Magdalena Garrido, coordinadora de la obra y presidenta de la Orquesta Álvarez Beigbeder.

El resultado es verdaderamente imponente, como se aprecia a las marchas procesionales incluidas en el primeros de los dos discos: 'Al pie de la Cruz', 'Nuestra Señora del Mayor Dolor', 'Memoria eterna', 'Mater desolata', 'Nuestra Señora de la Soledad', 'Desamparo', 'Cantemos al Señor', 'Cristo de la Expiración', 'Virgen del Valle', 'Amargura' y 'Cristo del Calvario'. En las vísperas de la Semana en las que aparece este trabajo en la calle, es obvio que es este el CD que más se está escuchando. Es el momento y, además, se mantiene sensible una realidad conemorativa: se cumplen 100 años de una de ellas: 'Cristo de la Expiración'.

Hay que estar, sin embargo, pendientes también de las curiosidades que el segundo disco ofrece: su 'Canto a Jerez en vendimia' (coro y orquesta) o un 'Album de juventud' que reúne piezas íntimas como 'Danza húngara', 'Danza del muñeco', 'Triste caminar' o 'Al higuí, al higuí, al higuí'. El segundo disco se completa con el 'Quinteto en sol' (con un aria y un moderato dignos de ser escuchados) y 'Bella España' (canción-himno a coro y orquesta) que cuentan con la mano de su hijo, el insigne compositor y letrista Manuel Alejandro. En este segundo CD se optó por una versión más reducida de la Orquesta Álvarez Beigbeder, conorquesta de cámara concretamente.

Quizá se trate de la mejor antología que, hasta el momento, se haya acercado a la obra compositiva de este músico del que siempre se dijo que pudo alcanzar niveles incluso mayores que los de otros cohetáneos con mayor fama. Ahora, la propia presidenta de la orquesta y coordinadora del proyecto Magdalena Garrido considera que "con gran alegría y satisfacción, en este año 2022, valorando su resultado artístico-musical como la culminación de un proyecto digno de ser visto como un legado musical importante para la ciudad de Jerez y su Semana Santa". En los albores de estos días grandes estamos ya.

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