El ronquido es un sonido fuerte que tiene lugar cuando al dormir se relajan las vías respiratorias donde pasa el aire. Al existir esta obstrucción crea cierta resistencia en esa vía aérea, por relajarse demasiado o por estar sometida a cargas excesivas, de tal manera que se producen esas vibraciones que lo causan. El ronquido puede ser la primera fase de un espectro que llegue a una consecuencia tan grave como la apnea obstructiva del sueño. La vía aérea es un tubo flexible que puede llegar a cerrar cada vez más e incluso hacerlo del todo. El roncar se asocia a un trastorno del sueño llamado la apnea obstructiva del sueño (AOS). Y esta sí puede tener consecuencias relevantes

El 40% de los varones a partir de los 40 años ronca y el 10% tiene apnea obstructiva del sueño. Entre las razones por las que se producen los ronquidos son varios, ya que influyen muchos factores. Uno de los fundamentales es el sobrepeso. Si la vía aérea se ve presionada por una carga mayor de grasa a su alrededor, se obstruye. Este es uno de los motivos por los que es más frecuente el ronquido en los varones.

Las causas pasan por el sobrepeso o un problema del paladar

Otro de los factores es la edad. Según se cumple años, la vía aérea pierde tono y se obstruye con facilidad. Además, afecta la sequedad, la sequedad, e incluso la posición. Si se duerme bocarriba se ronca con mayor facilidad, mientras que al descansar de lado se encuentra la vía más protegida, está más abierta y se ronca menos. También existen las alteraciones en la cara como el tabique nasal o con una barbilla pequeña que hace que la vía tenga menos espacio. Además, existen otros factores externos como el alcohol, el tabaco o determinados medicamentos.

Entre los síntomas que sufren aquellas personas que padecen este problema se encuentra, somnolencia excesiva durante el día, problemas para concentrarse, dolores de cabeza por la mañana o de garganta al despertar, ahogo por la noche, presión arterial alta, dolor en el pecho, etc. Según el experto en medicina dental del sueño, Andrés Ochogavía, puede degenerar en una diabetes tipo 2, además de perjudicar al nivel inmunológico, ya que la apnea baja el nivel de oxígeno y la sangre no se reparte bien por el organismo.

Existen diversas soluciones para el problema

Para poder subsanar este problema existen varias medidas. Una de las primeras es el adelgazar. Distinto es si existe una obstrucción en la nariz o unos pólipos excesivamente grandes. En ese caso, la forma de mejorar esta situación es a través de una cirugía. En muchas ocasiones este tipo de valoraciones la realiza un otorrino. La cuestión de la posición es también muy importante, ya que en el caso de poder hacer que la persona descanse de lado, hará que el ronquido disminuya.

Otras opciones pasan por un estudio médico de la nariz, boca, paladar, garganta y cuello para ver si existe una causa para tomar alguna de las medidas correctas y apropiadas que pueden pasar por tratar una alergia nasal o una infección, efectuar una intervención quirúrgica de rinoplastia o para reducir el tamaño del paladar y la garganta.