Se cumple una década de la tragedia ferroviaria de la noche de San Juan en Castelldefels
Se cumple una década de la tragedia ferroviaria de Castelldefels, que convirtió la noche de San Juan en una auténtica pesadilla
Redactor
Tiempo de lectura: 2'Actualizado 11:35
Se disponían a disfrutar de una noche de fiesta con motivo de las tradicionales verbenas que en la zona se organización para celebrar la noche de San Juan, pero todo acabó en una auténtica pesadilla.
Un grupo de unas 30 personas acaban de bajar de un cercanías en la estación Playa de Castelldefels, en Barcelona, cuando optaron por cruzar directamente por las vías las vías por un lugar indebido para poner rumbó a la verbena que tenía lugar en la playa. Eran las 23:25 h.
Sin embargo, no se percataron de la llegada de un tren Alaris que no tenía parada en la estación y que cubría el trayecto entre Alicante y Barcelona, y fueron arrolladas. Como consecuencia del accidente, un total de 12 perdieron la vida y otras 14 resultaron heridas de diferente gravedad.
La mala suerte y, sobre todo, la imprudencia de estas personas les hizo cruzar por un lugar indebido pues, como confirmación fuentes de Renfe, Adif, el Ayuntamiento y la Generalidad de Cataluña, no utilizaron el paso subterráneo que estaba abierto y señalizado.
Hasta 15 dotaciones de Bomberos de la Generalitat, 24 unidades de Soporte Vital Básico y Soporte Vital Avanzado del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), varias patrullas de Mossos d'Esquadra, efectivos de Cruz Roja incluido el grupo de psicólogos, y miembros del Instituto de Medicina Legal de Cataluña, tuvieron que desplazarse hasta el lugar, lo cual nos puede dar una idea de la magnitud del accidente. A esto hay que sumar que Protección Civil habilitó el Centro Cívico Frederic Mompou, de Castelldefels, para atender a los familiares de las víctimas.
Desde la Generalidad catalana, su presidente, José Montilla, declaró el 24 de junio, día de luto oficial en Cataluña.
EL SEGUNDO ACCIDENTE FERROVIARIO MÁS GRAVE EN 30 AÑOS
El de Castelldefels se convirtió en el segundo accidente ferroviario más grave de los que habían ocurrido hasta el momento en España en las tres últimas décadas, sólo por detrás del registrado en la localidad albaceteña de Chinchilla el 3 de junio 2003.
Aquel 3 de junio, un Talgo que cubría la línea entre Madrid y Cartagena chocaba con un mercancías procedente de Murcia a la altura de Chinchilla, dejando un total de 19 muertos y medio centenar de personas heridas como consecuencia del impacto entre ambos trenes.
Las investigaciones de este siniestro determinaron que el factor de circulación dejó en verde el semáforo de salida del tren Talgo, cuando venía en sentido contrario un mercancías.
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