Nuestra historia se desarrolla en Inglaterra. Allí, un perro se ha convertido en el centro de atención de los usuarios de la reconocida red social de Facebook. La escena que se compartió como la pólvora a través de internet ha dado literalmente la vuelta al mundo, volviéndose viral.

El adorable perrito se encontraba jugando en el jardín de su vivienda, un lugar muy adecuado para el esparcimiento de cualquier animal. En ese momento crítico, vio como el cartero llegaba a la puerta del domicilio de sus dueños. Tal fue su emoción al verlo, que corrió enseguida a la puerta para esperar su entrada inminente a su acogedor hogar.

El animal estaba feliz y pletórico. Se encontraba, no obstante, muy inquieto pero esa emoción no incomodó al cartero. El individuo pudo buscar sin problema alguno las cartas que correspondían a la dirección en la que convive el perrito con sus dueños. El vídeo que retrata la entrañable escena se ha convertido en un vídeo viral en Facebook que ha alcanzado países tan importantes como Estados Unidos, México y España.

El vídeo de Facebook se volvió de manera muy rápida viral... dado el impacto que causó en millones de usuarios. La principal conclusión a la que llegaron es que un perro puede tener amigos humanos. Así lo demuestran diversos estudios y esta preciosa historia muestra, una vez más, eso que se dice de que "el perro es el mejor amigo del hombre". Es una realidad. Las mascotas son amigos inseparables de nosotros que harían cualquier cosa por salvaguardar a su dueño y cuidar de su bienestar. Si hay algo de lo que pecan es de poco egoístas.

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Cuando el adorable perro vio que el cartero había encontrado sus cartas, se acercó y el individuo tocó con sumo cariño al can, que se dejó de forma muy tranquila y apaciguada. Después, le entregó al animal las cartas para que los llevara al interior de su hogar y lo hizo de manera totalmente envidiable.

Tal fue la sorpresa de los usuarios que presenciaron virtualmente la escena, que comenzó a compartirse la imagen a través de la conocida red social. En ese momento, el perro demostró el amor incondicional que tenía hacia ese cartero y su envidiable habilidad de acercar la correspondencia de sus dueños a los mismos.

La oxitocina fue la hormona que movió a ese animal

Tenemos más cosas en común con los perros de las que creemos. Una de ellas es la oxitocina que muestra el vínculo entre ambas especies. Se basa en el mismo circuito que une a madres e hijos durante el período de lactancia. Probablemente, cuando esa mascota vio a ese cartero, la oxitocina en su organismo alcanzó niveles muy elevados.

Cuando ese individuo y el perro se miraron directamente a los ojos, ambos vivieron una descarga intensa de oxitocina que reforzó ese vínculo afecto. Los autores de la investigación de la Universidad Azabu de Sagamihara (Japón), concluyeron que los perros se adaptaron al circulo neutral de los humanos que ha ido evolucionando para reforzar el vínculo entre madres e hijos. En ese experimento, los investigadores administraron oxitocina a un grupo de perros antes de que interactuaran con sus amos. Un fenómeno, por tanto, muy similar que se aprecia entre padres y madres de niños pequeños lo que supone un aumento de la hormona también en sus descendientes.